Un pillo John Hoffman, consejero delegado de GSMA, la empresa organizadora del Mobile. Hoy le entrevistan en La Vanguardia, El Periódico y Ara simultáneamente. Dice, en resumen, lo que titula La Vanguardia: "Barcelona es nuestra casa". El hombre atribuye la suspensión "a una tormenta perfecta", etcétera. Por una parte, alarga la mano como un mendigo humillado que quiere más misericordia que moneda. De otra, explica el fiasco con una metáfora meteorológica que hace pensar en una coincidencia desgraciada de todo tipo de maldades —¡una entre un millón, qué mala suerte!
En realidad, no explica nada de nada. Ni las causas de la suspensión, ni el proceso de decisión de GSMA, ni las opciones y datos que manejaron para cancelar la feria. Nada. Hoy, el resto de los medios reproduciremos los pasajes más notables de sus declaraciones y la entrevista habrá hecho efecto: dejarte con la cabeza caliente y los pies fríos. Los catalanes, como buenos sentimentales, se considerarán muy queridos y a otra cosa, mariposa. Harán falta más paciencia y más periodismo para saber qué demonios ha pasado.
También será coincidencia que la entrevista aparezca simultáneamente en tres diarios. Los malpensados dirán que quizá es demasiada coincidencia para pensar que no es parte de un plan de control de daños bien estudiado pero, oye, la vida está llena de casualidades.
De momento, el Mobile de Shanghái —exacto, a 691 kilómetros de Wuhan, zona cero del coronavirus— mantiene la convocatoria: se celebrará del 30 de junio al 2 de julio. También lo organiza GSMA. Sobre esta particular coincidencia las entrevistas a Hoffman no dicen nada.
Quizás no tiene nada que ver pero, pese al fiasco del Mobile de 2020, el año que viene se traslada a Barcelona Integrated Systems Europe (ISE), la mayor exposición del mundo sobre sistemas de integración audiovisual. "ISE viene a Barcelona a crecer, como lo hizo el Mobile en 2006", ha explicado Àngels Chacón, la consellera de Empresa, en Amsterdam, hasta este año base de operaciones de esa feria. A los 55.000 metros cuadrados del ISE 2020 han acudido 1.310 empresas y 81.268 asistentes. La cosa promete, porque 500 de esas empresas ya han reservado 47.000 metros cuadrados en la Fira de Barcelona para el próximo año y los organizadores estiman que el acontecimiento dejará en Barcelona más de 300 millones de euros (la cifra para el Mobile era de 500 millones). Quede dicho aquí como contrapeso positivo a la cancelación del Mobile, porque seguramente una cosa y la otra no tienen nada a ver. Como Hoffman ha prometido un Mobile 2021 colosal, parece que el año que viene será fantástico, nivel Fiebre del Oro. Por cierto, las portadas tampoco dicen nada de ISE.
Una nota sobre este titular (pequeño) de portada de El Mundo: "La Fiscalía desmonta la treta de la Generalitat para liberar a sus presos". Te tieens que reír con lo de "la treta" y "sus" presos. La Fiscalía, de momento, todavía se lame las heridas infligidas por la magistrada María Jesús Arnau, juzgado de vigilancia penitenciaria 5, que rechaza un informe parecido al que alaba hoy El Mundo —el fiscal se oponía al permiso otorgado a Jordi Cuixart. La magistrada, entre otros varapalos, recuerda al fiscal que ser partidario de la independencia y querer conseguirla por vía de la protesta pacífica no exige ningún tratamiento ni es una enfermedad, sino una opción perfectamente lícita en este estado de derecho, como explicaba con todo detalle y socarronería nuestra Elisa Beni. El Mundo no esconde el afán de ensañarse con Cuixart pero, de momento, tendrá que resignarse con una mentira en un titular para pasar su rabia.
