El precio de los carburantes ha llegado esta semana a nuevos máximos históricos después de encadenar su quinta subida consecutiva y encarecerse en lo que va de 2022 hasta un 5,6%, según los datos difundidos este jueves por el Boletín Petrolero de la Unión Europea. Según los datos, la gasolina esta semana se vende en España a una media de 1,538 euros el litro, lo cual supone un incremento del 1,18% con respecto a hace una semana, mientras que el gasóleo se vende a 1,422 euros. Con estos datos, el precio de la gasolina ha conseguido batir así el anterior máximo histórico registrado en septiembre de 2012, hace más de nueve años. De esta manera, el precio de los carburantes, después de la tregua dada en el final de 2021, cuando encadenó hasta cinco semanas de caídas, prosigue con la escalada iniciada con el arranque de 2022. Desde el inicio del año, el precio medio del litro de gasolina acumula una subida de casi el 4%, mientras que el gasóleo se ha elevado un 5,6%.
Escalada ininterrumpida
En comparación con la misma semana de 2021, la gasolina cuesta ahora un 25% más, enfrente del 28% que ha subido el gasóleo, mientras que si se analizan los precios de la misma semana de 2020, unos meses antes que estallara la pandemia, la gasolina es un 17% más cara y el gasóleo un 15%. Con estos precios, llenar un depósito medio de 55 litros con gasolina cuesta actualmente más de 84 euros, unos 17,1 euros más que hace un año, mientras que con gasóleo consigue los 78 euros, unos 17,3 euros más que en la última semana de enero 2021. Este nuevo encarecimiento en el precio de los combustibles se produce a rebufo de la escalada en el precio del crudo ante la incertidumbre geopolítica alimentada por las tensiones en Ucrania y un bajo nivel de oferta global, que llevó ya la semana pasada al barril de petróleo de calidad Brent, de referencia para Europa, a superar el umbral de los 90 dólares por primera vez desde octubre de 2014.
El precio de los carburantes depende de múltiples factores, como los impuestos, el coste de la materia prima y de la logística y los márgenes brutos. Este jueves, el barril de Brent se intercambiaba a 88,9 dólares, mientras que el West Texas Intermediate (WTI), de referencia para los Estados Unidos, cotizaba por encima de los 87,5 dólares. Con esta nueva subida en el precio de los carburantes, el llenado del depósito esta semana es un 25,3% más caro de lo que hace un año para el caso de la gasolina y un 28,3% superior en el caso del gasóleo.
Media europea
A pesar de los elevados precios que registran ambos carburantes en España, su precio se mantiene por debajo de la media europea, según el Boletín Petrolero. Los países con la gasolina más cara de Europa siguen siendo los Países Bajos (2,01 euros), Finlandia (1,888 euros) y Dinamarca (1,857 euros), mientras que el gasóleo con el precio más elevado se encuentra en Suecia, con un precio de 2,035 euros, seguido nuevamente de Finlandia (1,811 euros) y los Países Bajos (1,716 euros). En la otra cara de moneda se sitúan Bulgaria (1,240 euros), Polonia (1,282 euros) y Rumania (1,319 euros), que cuentan con la gasolina más barata del continente, mientras que Maltea, con un precio de 1,21 euros el litro, Bulgaria (1,267 euros) y Polonia (1,292 euros) tienen el gasóleo más económico. El precio de los carburantes en España también es menor que el de las grandes potencias europeas, como Alemania, donde la gasolina se paga en 1,772 euros y el gasóleo a 1,644 euros; Francia, con un precio de 1,746 euros en el caso de la gasolina y de 1,670 euros para el gasóleo; e Italia, que consigue los 1,796 euros para la gasolina y 1,667 euros el gasóleo. Además, el precio de la gasolina sin plomo de 95 está en España por debajo de la media de la Unión Europea, situada en 1,680 euros el litro, y de la zona euro, con un precio medio de 1,745 euros. En el caso del diésel ocurre una cosa similar, ya que el precio en la UE es de 1,567 y de 1,606 en la zona euro.