Las incertidumbres derivadas por el procés soberanista ya no figuran entre las tres principales preocupaciones que tienen las grandes empresas gerundenses. De un año al otro, el temor que la situación política afecte a la marcha del negocio ha caído del tercer hasta el séptimo lugar. Así lo constata el último estudio 'Girona 100', elaborado por la consultoría KPMG y la Universidad de Girona (UdG).
En el 2016, hasta un 30% de los directivos temían que la situación política en Catalunya tuviera consecuencias para sus empresas mientras que en el 2017, el porcentaje ha caído hasta el 16%. Por delante suyo, los directivos de las 100 grandes empresas de la demarcación sitúan otras preocupaciones.
La primera de todas, la creciente competencia (que aparece al 32% de las respuestas), seguida del incremento del precio de las materias primas (28%) o la preocupación por encontrar personal cualificado (28%). Y ya a más distancia, pero en todo caso siempre antes que el procés, la disminución de la rentabilidad o el aumento del coste de la mano de obra.
Más inversiones
Al lado de las preocupaciones, el estudio también pone de relieve cuáles son las demandas de los directivos de las grandes empresas. Y aquí casi la mitad de los encuestados (42%) reclama que se incrementen los incentivos para llevar a cabo inversiones. Además, uno de cada tres apuesta para que los acuerdos laborales sean "más sencillos y flexibles", se les reduzca papeleo y se rebajen los impuestos a que tienen que pagar.
El estado de las infraestructuras en la demarcación, y la demanda para que mejoren, también aparece dentro del listado de demandas de los empresarios. Pero lo hace en quinta posición (14%). Según la directora de la Cátedra de Empresa familiar de la UdG, Pilar Marquès, eso se puede deber simplemente a un tema de prioridades.
"Las infraestructuras se ven a medio plazo, y delante de eso las empresas reclaman que, ante todo, se les facilite la vida diaria; es decir, que se les reduzca la burocracia o que se les reconozcan incentivos por el trabajo que hacen", concreta la autora del estudio.
En el 2016: un buen año
El estudio también incluye un apartado sobre la evolución de las grandes firmas. Y de las respuestas de los directivos, se desprende que el 2016 ha sido un buen año. De hecho, el 80% de las empresas incrementaron plantilla y el 63% crecieron tanto en facturación como en exportaciones.
Sin embargo, del centenar de firmas, también está un 16% que cerraron el ejercicio con resultados negativos. Sobre todo, son firmas del sector del comercio y los servicios. Seguramente, según pone de relieve el socio responsable de KPMG Manel Blanco, porque el "mercado natural" de estos sectores suele ser el estatal.
Durante el 2015, y por séptimo ejercicio consecutivo, se constata cómo las 100 empresas mayores de la demarcación crecieron en ventas. En concreto, un 3%, llegando a facturar en conjunto 8.774 millones de euros. Al mismo tiempo, también hubo un incremento de la rentabilidad. O lo que es lo mismo, que el beneficio de las grandes empresas gerundenses, en conjunto, volvió a crecer. En concreto, lo llegó a hacer hasta un 27%, pasando de los 170 millones del 2014 a los 216 del 2015.