El sector de la hostelería y la restauración se ha manifestado esta tarde delante del Palau de la Generalitat contra las nuevas restricciones impuestas por el Govern, que sólo permiten abrir bares y restaurantes de 7.30h a 9.30h de la mañana y de 13h a 15.30h del mediodía.
La concentración ha empezado a las 18.00 horas en la plaza Sant Jaume de Barcelona, y en torno a las 18.25 horas un grupo de manifestantes se ha dirigido hacia la Via Laietana de Barcelona, con proclamas como "La hostelería no es el problema" o "Dónde son nuestras ayudas"?.
La concentración está convocada por el Gremio de Restauración de Barcelona, el Gremio de Empresarios de Discotecas de Barcelona, la patronal del ocio nocturno Fecalon, las federaciones de hostelería de Lleida y Girona, la Asociación de Empresarios de Hostelería de Tarragona y la Federación Intercomarcal de hostelería, Restauración y Turismo.
Las entidades convocantes han denunciado en un comunicado que las medidas para contener el brote de coronavirus no han contado con el sector y han indicado que detrás de ellas se esconde un "cierre total encubierto", por lo que han reclamado medidas "reales de rescate" por los sectores afectados.
Reacciones ante las nuevas restricciones
Bares y restaurantes se han quejado durante el día de las nuevas restricciones impuestas por el Govern y que han entrado en vigor hoy. "Eso es la estocada definitiva. No tienen en cuenta el patrón de consumo de los catalanes, ya que la gran mayoría de gente va a comer hacia las 14.45-15.00 horas", ha señalado a Melissa Privitera, del restaurante Amélie de la plaza de la Villa de Barcelona. En este sentido, Andrea, trabajadora del bar La Lluna de Manresa, ha dicho que cerrar los bares a las 9.30h es "como no abrir".
Según aseguran, las nuevas restricciones acabarán de hundir un sector que "está tocado de muerte". Son conscientes de que la salud de la gente está "por delante de todo" y entienden que las restricciones son necesarias para la pandemia, pero piden ayudas "para sobrevivir".
"No podemos seguir pagando los mismos gastos y recibir ninguna ayuda", avisa el responsable del bar Cal Manel de Manresa, Berni Sorinas. Y advierte que llevar hasta el extremo en el sector quiere decir "familias enteras sin poder pagar alquiler o hipotecas. Las consecuencias de todo eso serán terribles".
Fecasarm lleva a la justicia las restricciones
La Federación de Asociaciones de Actividades de Restauración y Musicales (Fecasarm) ha presentado la mañana del lunes ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) un recurso contencioso administrativo contra la resolución que prohíbe a la restauración abrir en la franja nocturna, según ha indicado en un comunicado este lunes.
Según la entidad, la apertura por franjas de las actividades es una "medida arbitraria, desproporcionada, ineficaz, discriminatoria, contraproducente e inviable económicamente".
Al mismo tiempo, la patronal ha solicitado "que se deje en suspenso la restricción horaria, dado que la misma provocará daños de muy difícil reparación o irreparable en muchos locales de restauración y de ocio nocturno de Catalunya, dada la importancia de las fechas".
Fecasarm ha recordado también que del sector dependen cerca de 200.000 puestos de trabajo directos e indirectos y que la medida fomentará los reencuentros ilegales de familiares y amigos, empeorando así las cifras sanitarias.