Los repartidores de la plataforma Glovo se han concentrado este jueves a la Sagrada Familia a las 12 del mediodía para exigir una mejora de sus condiciones laborales. Los trabajadores, que anunciaron una huelga para este día 1 de agosto, protestan por su condición de falsos autónomos, por la "falsa flexibilidad" y contra el trato que reciben por parte de algunos locales.

Por otra parte también denuncian que desde la empresa se los presiona para finalizar los pedidos que se supera el límite de espera para recibir más de una, además de un sistema de puntuación que consideran "ineficaz".

"Se demuestra que somos falsos autónomos, no nos pagan lo que nos deben, nos pagan por kilómetros. Pedimos flexibilidad", explica el rider Brian González, que ha convocado la concentración. "Pedimos flexibilidad total de las horas que queramos trabajar. Me están pagando 30 euros al día para trabajar 3 o 4 horas, que es el máximo que me dan. ¿Qué tiene de autónomo eso?", se ha preguntado. "Esta manifestación ha salido del 'cabreo' común de todos los Glovers". Y remarca: "El horario lo escogen ellos". De hecho, explica que Glovo pedía trabajar este jueves con bonificaciones y apertura de calendario. Eso quiere decir que el rider escoge el horario que quiere trabajar. La voluntad de eso era evitar que los repartidores secundaran la huelga.

 

"Lo que han hecho es llamar a los riders para abrir el horario y que no vinieran", detalla al presidente de la Asociación Autónoma de Riders, Badr Eddine Hilali. "Nos gustaría sentarnos y hablar con la gente que toma decisiones y llegar a un acuerdo".

 

Después de concentrarse durante casi una hora en Sagrada Familia, algunos de los riders han ido hasta la sede de Glovo para intentar buscar diálogo con la empresa.

La protesta llega después de varias sentencias a favor y de otras en contra sobre el régimen laboral de los riders y las condiciones en que trabajan. El conflicto se agravó todavía más a raíz de la muerte de un repartidor de la plataforma hace unas semanas.