El presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, ha acusado a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, de promover "propuestas populistas" y de decrecimiento económico, al contrario que los empresarios. El presidente de la patronal catalana ha aprovechado su intervención en la Reunió Cercle d'Economia junto al presidente de la Cámara de España, José Luis Bonet; el presidente del Círculo de Empresarios, Manuel Pérez-Sala, y el presidente del Círculo de Empresarios Vascos, José Galíndez Zubiría, para replicado al discurso que la alcaldesa pronunció este miércoles en la misma reunión.
Sánchez Llibre, muy tajante, ha recordado a Colau que desde Foment están a favor de la ampliación del Aeropuerto del Prat, de que los coches lleven publicidad, de que los vehículos particulares tengan facilidades para circular por la ciudad cuando así lo elijan, del comercio y de la hostelería. "Los empresarios catalanes vamos a continuar defendiendo políticas que vayan en la dirección del crecimiento económico de la ciudad, en contra de las propuestas populistas que hacen determinados representantes políticos", ha dicho, y las ha calificado también de autoritarias.
"Los empresarios lo estamos pasando muy mal", ha lamentado Sánchez Llibre, y ha pedido que las políticas tanto del Gobierno como de la Generalitat vayan enfocadas a disminuir la incertidumbre del contexto actual, así como que implanten un ecosistema fiscal competitivo, que penalice la economía sumergida y que no aumente los impuestos a las personas que ya los pagan.
Eliminar impuestos
En su intervención, Sánchez Llibre también ha insistido en que hay que eliminar el impuesto de patrimonio y que el Gobierno racionalice el gasto público y deflacte el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) para que los ciudadanos recuperen su nivel de renta ante el aumento de la inflación. Por último, el presidente de Foment ha pedido a las administraciones que sean eficientes y racionales a la hora de utilizar el gasto público y no lastren, en sus palabras, la competitividad de las empresas; así como la creación de un pacto social con el que el Gobierno colabore en pro de la competitividad y la subida de los salarios, pero "sin una intervención directa".
En esta misma línea se han pronunciado Manuel Pérez-Sala y José Galíndez Zubiría que han considerado que España necesita una reforma fiscal y han criticado el impuesto de patrimonio. Galíndez ha destacado que el impuesto de patrimonio es del 1% en el País Vasco y que "ha espantado a todos los directivos que quisiéramos atraer", y ha lamentado que esto frene la actividad empresarial del territorio.
Pérez-Sala ha apuntado que "España tiene que decidir si quiere salir de la irrelevancia" y ha dicho que los Fondos Next Generation de la Unión Europea tienen que llegar a España acompañados de una reforma estructural. Ha considerado que la reforma laboral no beneficia el empleo y ha instado al Gobierno a emprender cambios fiscales que "armonicen" el impuesto de patrimonio entre comunidades autónomas y con Europa, donde el impuesto no existe como figura impositiva separada de otras, ha dicho.
Por último, José Luis Bonet, ha pedido que se acompañe a las pymes en su transformación digital a través de los fondos Next Generation EU. "Las pymes tienen que ser ayudadas y acompañadas, y para eso estamos los que las representamos", ha apuntado, y ha pedido la ayuda de los bancos, las patronales y los colegios profesionales. Por otro lado, ha mostrado su optimismo con el momento económico actual, ya que a pesar de la inflación o el estrangulamiento de las cadenas de suministro, "no se puede hablar de recesión ni de estanflación". Aunque ha admitido que hay una ralentización del crecimiento de la economía, ha recordado que las previsiones de la entidad cameral para este 2022 es que crezca un 4,3%.