Seat cifra entre 2.500 y 2.800 personas el excedente de plantilla por la transición hacia la fabricación del coche eléctrico, que comportará una reducción de un 30% de las horas de trabajo en comparación con el de combustión. Así lo ha anunciado la automovilística en la cuarta reunión con los sindicatos para negociar el convenio colectivo de la empresa y que se produjo este martes. Fuentes de Seat han confirmado que en una primera valoración de la estructura actual de la plantilla estiman que hay 1.800 puestos de trabajo directos y 1.000 indirectas que podrían no tener carga de trabajo con la electrificación del grupo. La empresa apuesta por reorganizar progresivamente la estructura para "garantizar un modelo de negocio sostenible"
Al mismo tiempo, la compañía cree que hay que definir el futuro de Seat Componentes", la planta que el grupo tiene en el Prat de Llobregat, que fabrica cajas de cambios y que esperaba recibir el encargo de fabricar el motor eléctrico. Fuentes de la empresa asegura que trabaja para encontrar "soluciones alternativas a través de consenso" con los sindicatos, en caso de que se confirme que quien se lleva la carga de trabajo es la planta de Audi en Hungría. Seat recuerda que "sin la electrificación no existe un plano B" y admite que la transición es "un reto" y por eso están haciendo "un gran esfuerzo inversor" de más de 5.000 millones de euros hasta el 2025. La empresa está a la espera de participar en el PERTE del vehículo eléctrico y conectado, a través del cual Volkswagen quiere recibir recursos para instalar una planta de baterías en España así como electrificar las plantas donde se harían los vehículos urbanos eléctricos del consorcio alemán.
Ahora, la empresa asegura que el 20.º convenio colectivo "tiene que impulsar la competitividad de la empresa para poder optar a una segunda plataforma". Con respecto a las demandas sindicales, que reclamaban sacar adelante la electrificación sin tocar ni sueldo ni el personal, han asegurado que la implementación de las propuestas "supondrían un aumento del coste de entre un 25 y un 30%", en una retribución salarial que ya está "entre un 15% y un 25% por encima de la media del sector".
Las reclamaciones de CCOO y UGT
CCOO y UGT ya reclamaron a finales de febrero en Seat que el plan industrial que se negocia en la renovación del 20.º convenio sea "una prioridad" y exigieron a la dirección que concrete alternativas que aseguren el futuro de la fábrica de Componentes del Prat de Llobregat, que ahora produce cajas de cambios, de la misma manera que para el resto de centros, "garantizando el empleo y las condiciones laborales". Los sindicatos mayoritarios no ven justo que Seat esté "prácticamente descartada" de las decisiones que está tomando el grupo Volkswagen por el ensamblamiento de baterías y fabricación del motor eléctrico, que "se alejan de lo que se comprometió" a la hora de recibir ayudas del PERTE y "dejan en estos momentos sin alternativa y futuro" la planta del Prat.