Flag Ship Store (tienda insignia) y ecosistema del coche conectado. Esta es la gran apuesta por partida doble que el presidente de Seat, Luca De Meo, ha anunciado en su intervención al XXXI Encuentro de Automoción de IESE que reúne a los principales directivos del sector de la automoción. Más concretamente, el directivo italiano ha explicado que "el coche conectado es la prioridad de Seat en cuanto al negocio y con respecto a la hoja de ruta tecnológica" ya que el objetivo principal de la multinacional con sede en Martorell que utiliza el eslogan de "Seat, orgullo español" es "conectar al usuario con el concesionario, con las infraestructuras y a todos estos elementos entre sí." Y a la prioridad, otra prioridad: Barcelona.
Uno de los grandes cambios de paradigma dentro del negocio del automóvil, pasa por considerar al cliente como usuario en lugar de propietario. Para los fabricantes, el coche conectado no es otro nivel sino que se trata de otro juego. En este nuevo juego el cliente será el centro de la red y no el punto final", ha añadido De Meo. Precisamente por eso, en los próximos meses, Seat llevará a cabo una prueba piloto en la capital catalana del nuevo ecosistema que quiere construir en torno al coche conectado. O lo que es lo mismo una experiencia inteligente que incluye el producto pero también servicios junto con concesionarios y otros agentes económicos y automovilísticos.
Tejer alianzas con Barcelona
Para conseguirlo, la marca automovilística está en proceso de tejer y consolidar alianzas con los principales agentes del sector digital en Barcelona, entre los cuales se incluye el Ayuntamiento encabezado por Ada Colau así como otras instituciones y startups. "Es una forma efectiva que refuerza la identidad de marca".
Además de la apuesta, por el coche conectado, el presidente de Seat ha anunciado que está buscando posibles ubicaciones en el centro de la capital catalana para instalar un flag ship store (tienda insignia). Después de que Vinçon se haya convertido en una flag ship de Massimo Dutti por cortesía del propietario de Inditex, Amancio Ortega, Seat también quiere crear un gran concesionario de referencia. El objetivo es nuevamente conectar de la forma más smart posible la empresa con el territorio catalán y dar a conocer todavía más la marca. Según De Meo, "en los últimos años a duras penas podíamos considerarnos followers, y ahora podemos y queremos tener un papel de liderazgo en uno de los temas relevantes de cara al futuro". Y es que "Seat sin Barcelona sería algo incompleto".
Un orgullo por bandera
Y más allá de la capital catalana, Seat se ha marcado como objetivo mejorar la percepción que se tiene de la marca en España. Una finalidad por la cual está haciendo uso del eslogan "Seat, orgullo español" o la imagen de la bandera española en sus presentaciones públicas. Con el orgullo por bandera, se trata, además, de conseguir que la multinacional consigue volver a posicionar como primera marca en ventas dentro del mercado español. "La gente de España tiene que oír que Seat es su marca de movilidad y automoción", ha asegurado De Meo, procurando así recuperar el vínculo emocional que existía entre la marca y la sociedad española durante los años 70. Aquel momento en que "el 600 era un miembro más de la familia".
En este sentido, el presidente de Seat ha recordado que la firma automovilística es el primer inversor industrial en Investigación y Desarrollo (I+D) dentro del conjunto de España a la vez que ya representa el 3% de las exportaciones españolas y un 1% del PIB con una creciente aportación en la ocupación.
Visión de futuro
Para avanzar, hay que mirar el futuro desde el presente. Y eso es precisamente lo que procura hacer el máximo responsable de Seat que también ha confirmado que espera contar con un modelo eléctrico comercializable al horizonte del 2020. De hecho, De Meo ya cuenta con un prototipo con el cual se mueve por Barcelona y que este martes le ha servido para ir a buscar al president de la Generalitat, Carles Puigdemont, en las puertas del Palau en la Plaça Sant Jaume para ir juntos hasta el Smart City Expo World Congress (SCEWC).
Más allá del paseo presidencial y del coche eléctrico, Seat también aspira a hacer realidad una estrategia que pasa por hacer que el ciudadano se compre un vehículo por Internet, lo recoja en el concesionario y pueda pagar una cantidad fija al mes por un servicio que le permita olvidarse del seguro y del mantenimiento a la vez que sustituya el coche cada dos años. Además, también permitirá renovar el teléfono inteligente, utilizar el servicio de facturación rápida en el aeropuerto o poner en marcha la calefacción de casa desde el coche, entre otros.