Unas 400 personas se han manifestado en Vielha para reclamar a las diferentes administraciones medidas urgentes por el sector turístico. La concentración aranesa ha reunido a representantes del sector hotelero, de la restauración, de alojamientos turísticos, comerciantes, empresas de deportes de aventura o guías de montaña. El sector turístico es el principal motor económico de la Val d'Aran.

Las restricciones de movilidad y confinamientos perimetrales que todavía continúan vigentes en Catalunya, así como en la frontera con Francia, comprometen la viabilidad de estos negocios. Según Xacobé Bartolomé, presidente del Grèmi d'Ostalaria dera Val d'Aran, si no se revierte esta medida, el sector "está muerto".

El Gobierno ha abierto este jueves una línea de ayudas con valor de 19 millones de euros para el sector turístico, de los cuales se podrían beneficiar algunos de estos negocios.

La manifestación

Algunas de las peticiones por parte de los manifestantes han sido la suspensión del pago de impuestos como el IBI, la basura o el agua para hacer más soportable la situación que están viviendo por la pandemia. Con consignas como 'SOS Arán, No trabajamos, no pagamos' o 'Stop impuestos', han definido su situación como "insostenible" y ha pedido ser consultados y poder participar en la toma de decisiones que afectan el sector.

El sector turístico de la Val d'Aran se han manifestado hoy en Vielha. / ACN


A la concentración en la plaza de delante de el Ayuntamiento de Vielha se ha leído un manifiesto muy aplaudido por todos los manifestantes. Entre estos se encontraban monitores de esquí, guías de montaña, comerciantes, taxistas, restauradores, hoteleros, de todos los pueblos de la Val d'Aran.

Posteriormente, la concentración se ha trasladado a la C-28 y durante unos minutos los manifestantes han cortado la carretera a su paso por la capital aranesa.

Los manifestantes han hecho cánticos como "queremos trabajar" acompañados de ruido haciendo repiquetear sus herramientas de trabajo como cazuelas, tapaderas o paellas y algunos con palos de esquí.

Afectados por las restricciones catalanas y francesas

Lionel es responsable de un establecimiento turístico en Naut Aran y uno de los afectados por las restricciones no solamente catalanas, sino que también por las francesas. Ha explicado que las medidas adoptadas por el gobierno francés los afectan directamente por la proximidad con la frontera. Por todo, pide una compensación para cubrir los costes que tienen como los recibos del alquiler, el agua, la basura o el IBI.

Carme es otra empresaria afectada por las restricciones y la pandemia de la Covid. Tiene alojamientos turísticos en Arties, muy cerca de Baqueira, y ha explicado que las reservas son del 0%, mientras que otros años ya fregarían el 100%. Carme ha pedido más libertad para gestionar los negocios y que pueda llegar gente de fuera de Catalunya para "poder trabajar".