La Plataforma de Transportistas autónomos no ha repetido el éxito del primer paro del pasado mes de marzo y se ha visto obligada a suspender la huelga cuando nada más habían pasado poco más de 24 horas desde que se anunció. Así pues, la gran movilización prevista para ayer el lunes desde la rotonda de Atocha hizo aguas, con manifestantes que todos juntos a duras penas llegaban al millar. Posteriormente, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, rechazó recibirlos justificando motivos de agenda. Hoy, en una segunda jornada que preveían que fuera a más, ha hecho aguas.

La Plataforma Nacional para la Defensa del Sector del Transporte ha argumentado que se enfrenta a una "campaña sin descanso de acusaciones". En un comunicado, la citada agrupación, compuesta mayoritariamente por autónomos y pymes, asegura que esta "campaña" procede de cargadores (sus clientes), patronales del sector, sindicatos, cierto ámbito político e, incluso, algunos medios de comunicación.

En cualquier caso, la Plataforma defiende que seguirá "contra todos los obstáculos defendiendo y luchando" sus reclamos para intentar mejorar las condiciones de trabajo del sector.

Sin presencia en Catalunya

Desde Catalunya, todo hacía prever que esta movilización tendría poca repercusión. De entrada, la Plataforma marcó el primer día centrándose únicamente en Madrid. Pero también suspendieron, a última hora, movilizaciones secundarias como un corte previsto en la Ronda Litoral o una marcha a pie desde la Zona Franca de Barcelona. Anoche, justo estaban debatiendo qué hacer y, finalmente, se descartó ampliar la huelga por todo el Estado ya que la fuerza, tan sólo en Madrid, era muy pobre. El delegado de la Plataforma en Catalunya, Carlos Domínguez, ya aseguró en declaraciones en ElNacional.cat que la cifra de manifestante "era irrelevante" y lo que contaba es que "las familias, aunque fuera una, lo estaban pasando muy mal".

Por otra parte, hay que recordar que ningún sindicato se sumó, más allá de gremios a nivel individual representando el sector de la agricultura y la pesca. Desde la Plataforma reclaman al Gobierno, entre otros aspectos, más control sobre el cumplimiento de las leyes de costes y de carga y descarga, extender la cobertura o establecer multas de hasta 90.000 euros. 

La polèmica continúa rodeando este colectivo. El líder de esta movilización y presidente de la Plataforma, Manuel Hernández, conocido como 'Manolín', ha vuelto a situarse en el centro de las miradas. Detrás de esta figura popularmente conocida en Castilla la Mancha, en concreto, en la localidad de Hellín (Albacete) se encuentra un empresario acusado de llevar a la empresa familiar a la quiebra y de estar vinculado con Vox.