Los dos sindicatos mayoritarios españoles, UGT y Comisiones Obreras, han aprobado este viernes por unanimidad la reforma laboral que proponía el Gobierno. Estas dos aprobaciones se aprueba definitivamente la reforma, ya que esta mañana ha sido la CEOE, la patronal, quien ha dado su visto bueno al texto, por el cual podrá entrar en el Consejo de ministros del próximo 28 de diciembre y aprobar definitivamente.
El primer sindicato a aprobar la reforma ha sido la UGT, cuando su comité confederal ha dado apoyo por unanimidad la propuesta de reforma laboral, según informan fuentes sindicales. En un comunicado, UGT destaca que este acuerdo se convierte "en el primero en democracia a sumar derechos, no recortarlos" con tres objetivos fundamentales: la recuperación de la negociación colectiva, la lucha contra la temporalidad y avanzar en la estabilidad en el empleo.
La UGT ha calificado el acuerdo como "muy positivo para el mercado laboral" español y considera que "se convierte en el primero en democracia a sumar derechos, no recortarlos". "Consigue tres objetivos básicos: la recuperación de la negociación colectiva, la lucha contra la temporalidad y avanzar|adelantar en la estabilidad en el empleo|ocupación. Objetivos coincidentes con las demandas hechas por la Unión Europea para nuestro país en el marco de la recuperación económica y salida de la crisis", ha expresado el sindicato en un comunicado. El sindicato también ha instado el "acuerdo final" de la reforma y ha pedido a los partidos políticos que lo suscriban en el trámite parlamentario.
Un acuerdo histórico
Por su parte, el Gobierno ha asegurado que "se trata de un acuerdo histórico que homologa el mercado de trabajo español al europeo". En un comunicado, también celebran que la reforma aborda los principales problemas del mercado de trabajo español, singularmente la temporalidad, con la simplificación de los contratos reanudando la causalidad, incrementando las sanciones a su uso irregular y fomentando la estabilidad en el empleo.
Además, hay que apuntar, que con la nueva reforma se establece un cambio de paradigma en la formación para trabajadores y trabajadoras, ya que se impulsará impulsando la contratación formativa. Otro de los puntos importantes de la reforma es la recuperación de la ultraactividad indefinida y se acaba con la prioridad de convenio de empresa en material salarial para acabar con el mecanismo de devaluación salarial garantizando los derechos de las personas subcontratadas.
Este nuevo pacto tripartito, después de lo que ya se consiguió por las pensiones, también permitirá restablecer el equilibrio en las relaciones laborales a nuestro país y, según apunta el Gobierno, "propiciará una recuperación económica más justa e inclusiva". La norma proporcionará instrumentos eficaces para proteger a los trabajadores y dotar al tejido productivo de herramientas para mantener el empleo respetando los derechos laborales y de nuevos mecanismos como el ERTE de manera estructural que incorpora un mecanismo RED para hacer frente a las crisis cíclicas o sectoriales.