VidaCaixa, el grupo asegurador de CaixaBank, ganó 388,7 millones de euros durante el primer semestre del año, un 7% más que en el mismo periodo del año anterior y situó su actividad comercial en niveles prepandemia. Según la compañía, el crecimiento sostenido de los recursos gestionados y el volumen mayor en las carteras de negocio y ahorro son las bases de este crecimiento. La actividad comercial de la compañía, por su parte, se ha situado en niveles similares a los registrados antes de la pandemia, así las delgaduchas y aportaciones de VidaCaixa han sido de 5.512,1 millones de euros, un 3,5% más que hace un año y un 0,4% más que en el 2019, y el 84% del total corresponde al negocio de ahorro. Los recursos gestionados por VidaCaixa han crecido un 4%, hasta situarse en 113.586 millones de euros, a pesar de la volatilidad registrada en los mercados.
Del total, 65.301 millones de euros corresponden a seguros de vida, con 4.317 millones provenientes de Bankia Vida, 40.841 millones de euros se concentran en planes de pensiones y EPSV, y 7.444 millones son de BPI Vida y Pensõés. En estos seis meses, VidaCaixa ha abonado a sus clientes 2.681 millones de euros en prestaciones, un 8% más que el año pasado, y aproximadamente la mitad, 1.240 millones de euros, se han pagado en forma de renta. Según la entidad, con estos resultados, VidaCaixa se mantiene como líder del sector asegurador en el Estado, ocupando la primera posición en vida con un 34% del total de provisiones, y mantiene también el liderazgo en planes de pensiones, con un 34% del volumen total de ahorro gestionado. Además, hay que recordar que la compañía continúa inmersa en la integración de Bankia Vida, proceso que está previsto que finalice durante el último trimestre del año.
Al mismo tiempo, durante la primera mitad del 2022, la ratio de solvencia sobre el capital requerido ha sido de 160%. Los seguros de ahorro, por su parte, concentran gran parte del volumen de delgaduchas comercializadas hasta junio, tanto en el segmento individual como en el colectivo, llegando hasta los 3.560,7 millones de euros, un 8,7% más, y 389,8 millones de euros, un 2,1% más, respectivamente. Las aportaciones a planes de pensiones han alcanzado los 862 millones de euros, un 14,2% menos, y el segmento individual se han situado en los 562,7 millones de euros, un 13,5% menos que en el mismo periodo del año anterior. En colectivos, las aportaciones a planes de empleo han estado de 299,3 millones, un 15,5% menos que el año pasado, a causa de las aportaciones extraordinarias en BPI Vida y Pensõés en el 2021, aunque considerando solamente el mercado en España, las aportaciones a planes de empleo han crecido un 38%. Según VidaCaixa, los recursos gestionados en planes de pensiones han bajado por la caída de los mercados, que ha impactado en las valorizaciones y las rentabilidades, y por el descenso de las aportaciones por el cambio en su tratamiento fiscal.
Los planes individuales y EPSV cerraron en junio con 28.272,1 millones de euros, un 5,9% menos, aunque se integraron 6.500 millones de euros en 2021 procedentes de Bankia Pensiones. Los planes de empleo y del sistema asociado han contado con 15.653,7 millones de euros, un 2,8% menos y se integraron más de 2.000 millones de euros en planes de empleo de Bankia Pensiones en el 2021. En los últimos doce meses, los planes de pensiones de VidaCaixa han obtenido una rentabilidad media del -6,2%, enfrente del -6,6% del conjunto de planes de pensiones del sistema individual en España.
VidaCaixa ha presentado estos resultados en un contexto en el cual ha destacado el debilitamiento de la recuperación de la economía mundial, la invasión de Ucrania y la política de COVID cero de China, que han impactado especialmente en los precios de la energía, y el giro cabe a políticas monetarias restrictivas, que han puesto en marcha los principales Bancos Centrales.