A la espera de que los trabajadores de la empresa de seguridad del aeropuerto de El Prat validen o no el preacuerdo que ya ha aceptado Eulen, tras la mediación de la Conselleria de Treball, y después de muchas jornadas sin una explicación oficial por parte del verdadero responsable del caos que se está produciendo, la empresa semipública Aena, vale la pena recapitular. Y señalar.
Primera: No se ha explicado por qué el Gobierno español ha dejado que se deteriore la situación hasta extremos que dañan gravemente la imagen de Barcelona y de Catalunya. La infraestructura es suya, las fuerzas de seguridad, Guardia Civil y Policía Nacional, también, la dirección del aeropuerto, igual. ¿En toda la cadena del Ministerio de Fomento y de Aena nadie podía haber tomado cartas en el asunto hace semanas?
Segunda: No se ha explicado por qué se han concentrado todos los problemas en El Prat nuevamente, como le tocó con el control de pasaportes el pasado mes de mayo. Ni por qué sigue habiendo colas de hasta una hora recién entrada la madrugada, pasajeros que pierden el avión y aglomeraciones inexplicables los días en que no hay huelga. Esta semana solo la ha habido el lunes.
Tercero: No se ha explicado por qué Eulen consiguió desplazar a Prosegur de la gestión de seguridad del aeropuerto de Barcelona, con un servicio claramente inferior, al tiempo que incrementaba sus beneficios. Por en medio, Micaela Núñez Feijóo, la hermana del presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo. Silencio.
Cuarto: No se ha explicado por qué con casi el mismo número de pasajeros en Barajas —50,4 millones el pasado año— que en El Prat—44,1 millones—, en el primero la seguridad cuesta al año 21,7 millones de euros y en el segundo, 12 millones. Así, claro que Barajas no tiene problemas.
Quinto: No se ha explicado por qué El Prat genera beneficios de 340 millones de euros, un poco más del 50% de lo ganado por Aena (651,6), y Barajas tan solo 27,5 millones. Peor servicio, menos inversión y mayores beneficios. Con esa explicación, ¿quién cede la titularidad de El Prat al Govern?