Tal día como hoy del año 1932, hace 92 años, se celebraban las primeras elecciones al Parlament de Catalunya de la historia. Esos comicios eran el resultado de un proceso que se había iniciado el 14 de abril del año anterior, cuando se confirmó el escrutinio de las elecciones municipales de dos días antes. La victoria de los partidos republicanos había precipitado la caída del régimen monárquico y la restauración del autogobierno catalán (que se adelantaba a la proclamación de la Segunda República). Francesc Macià había sido nombrado president de la Generalitat provisional que tenía que redactar un texto estatutario, convocar y celebrar un referéndum de aprobación del Estatut, y convocar y celebrar unas elecciones para constituir un Parlament y un gobierno.

El 20 de noviembre de 1932 sería el día elegido para que todos los hombres mayores de edad (las mujeres todavía no tenían reconocido el derecho al voto) decidieran a quién confiaban el primer gobierno catalán surgido de unas elecciones democráticas. Desde el primer momento, esos comicios se plantearon como una carrera entre las dos principales fuerzas políticas del momento para dirimir la primacía política en Catalunya: la recién creada Esquerra Republicana de Catalunya, liderada por Francesc Macià i Llussà y que había ganado las municipales y las generales de 1931, y la Lliga Regionalista de Catalunya, liderada por Joan Ventosa i Calvell, que había sido el partido hegemónico en el país durante buena parte del primer cuarto de siglo (hasta el golpe de Estado de 1923).

Esquerra Republicana y sus confluencias (Unió Socialista de Catalunya, Partit Republicà Democràtic Federal, Partit Radical Autonomista y Unió Catalanista) obtuvo casi 225.000 votos (el 43,90%), que se tradujeron en 67 diputados. Y la Lliga Regionalista (con la Unió Democràtica de Catalunya), poco más de 138.000 votos (el 27,05%), que se tradujeron en 17 diputados. La coalición formada por Acció Catalanista y el Partit Radical Socialista obtuvo algo más de 39.000 (el 7,64%), lo que le otorgaría el diputado restante. Después de esos resultados, Francesc Macià renovó su cargo (era president provisional y pasaba a president electo) hasta su muerte (el 25 de diciembre de 1933).