Tal día como hoy del año 1971, hace 46 años, un grupo de personalidades del mundo intelectual y del mundo profesional catalanes se reunía en la iglesia de Sant Agustí, en el barrio barcelonés del Raval, y constituía la Assemblea de Catalunya; la plataforma unitaria del antifranquismo que agrupaba la oposición política y social contra la dictadura de Franco. La constitución de la Assemblea de Catalunya había sido por iniciativa de la Coordinadora de Fuerzas Políticas de Catalunya, agrupación política en la clandestinidad creada el año 1967 con el propósito de unificar esfuerzos y estrategias dirigidas a alcanzar un régimen de libertades democráticas.
En aquella sesión constitutiva se reunieron unas trescientas personas vinculadas a partidos políticos, entidades culturales, sindicatos obreros y asociaciones vecinales, que redactarían los puntos programáticos de la Assemblea: reivindicación de libertades sociales y políticas; amnistía para los presos políticos de la dictadura, restablecimiento del Estatut de 1932 con todas las instituciones como paso previo a la autodeterminación; y coordinación de acciones con las organizaciones democráticas de los otros pueblos españoles. Básicamente la Assemblea recogía el programa político de la Coordinadora y lo hacía extensivo al conjunto de entidades culturales, sindicatos obreros y asociaciones vecinales que formaban el tejido social.
Manifestación Tarragona (8 de febrero de 1976) / Fuente Universitat de Barcelona
La Assemblea de Catalunya se convertiría en el principal marco de coordinación de la resistencia antifranquista; y organizaría y lideraría las principales movilizaciones populares de la época en diferentes puntos del país que serían disueltas violentamente por la policía del régimen; y la multitudinaria manifestación de la Diada de 1976 en Sant Boi —la primera no clandestina— que reuniría a más de un millón de personas, que venía precedida de la campaña "¡Queremos el Estatut!". En el plano político la Assemblea promovería la candidatura Entesa pels catalans, que en las primeras elecciones generales españolas de 1977 conseguiría 15 senadores de los 16 posibles.