Tal día como hoy del año 1809, hace 211 años, las personalidades más destacadas del barrio catalán de Montserrat en Buenos Aires (oficiales de la milicia urbana Miñones de Cataluña, y miembros destacados del Consulado de Comercio de Buenos Aires), protagonizaban una revuelta que marcaría el inicio de las luchas por la independencia de la colonia hispánica de Río de la Plata. Aquella revuelta, llamada Asonada de Álzaga, consistió en la movilización de las milicias urbanas Miñones de Cataluña, Tercio de Gallegos y Tercio de Vizcainos; y su concentración en los antiguos Arcos de la Recova (en el extremo sur del barrio de Montserrat) con el propósito de provocar la dimisión y forzar la expulsión del virrey hispánico.
El virrey hispánico Santiago de Líniers, consciente de su soledad política y militar, firmó la dimisión y la entrega del poder al Cabildo de Buenos Aires. Pero cuando, pasadas las horas, se disponía a embarcar hacia la metrópoli, se produjo un hecho que pondría de relieve la división interna que, en aquel momento, afectaba el movimiento soberanista argentino. Cornelio Saavedra, jefe militar de la milicia urbana Regimiento de Patricios (formado por las élites criollas de origen castellano) salió al auxilio del virrey, y con una acción armada rápida e inesperada, lo situó de nuevo en el gobierno de la colonia. Acto seguido, Liniers y Saavedra protagonizarían una maniobra represiva que conduciría a los principales líderes de la Asonada en la prisión.
Mientras que los comerciantes catalanes Matheu, Larreu, Nadal, Reynals o Alsina, o el vasco Álzaga eran partidarios de proclamar una república inspirada en las revoluciones americana (1776) y francesa (1789), los patricios criollos (latifundistas agroganaderos), liderados por Saavedra, Veytes, Belgrano, Castelli o Villegas, se inclinaban por la constitución de un reino independiente, inspirado en la monarquía parlamentaria inglesa, y proponían coronar a Carlota Joaquina de Borbón (hermana de Fernando VII). Finalmente se impondría una fórmula consensuada: el 25 de mayo de 1810 se proclamaría la primera Junta independiente, presidida por Saavedra y participada por los ministros Matheu y Larreu. Álzaga sería primer alcalde independiente de Buenos Aires.