Tal día como hoy del año 2003, hace 14 años, el Parlament de Catalunya investía a Pasqual Maragall y Mira como 127º presidente de la Generalitat. La investidura de Maragall era el resultado de los Pactos del Tinell, formalizados seis días antes (14 de diciembre de 2003) entre la segunda, la tercera y la quinta fuerzas políticas surgidas de las elecciones al Parlamento del 16 de noviembre de 2003. Pasqual Maragall sería investido con los votos de los grupos parlamentarios del Partit dels Socialistes-Ciutadans pel Canvi (42 escaños), Esquerra Republicana de Catalunya (23 escaños) y la coalición Iniciativa per Catalunya-Verds i Esquerra Unida-Alternativa (9 escaños).
En aquellas elecciones, la coalición Convergència y Unió —que presentaba por primera vez a Artur Mas como cabeza de lista— obtuvo 1.024.425 votos (30,94%), que se traducirían en 46 escaños, diez menos que en los anteriores comicios de 1999. El PSC-Ciutadans pel Canvi obtuvo 1.031.454 votos (31,16%), traducidos en 42 escaños, también diez menos que en los anteriores comicios. Esquerra Republicana, en cambio, sería la ganadora efectiva de aquellas elecciones: con 544.324 votos (16,44%), que se traducían en 23 escaños (11 más que en los anteriores comicios), recuperaba la tercera posición, que había perdido en 1999 en beneficio del PP y se convertía en fuerza decisiva para formar gobierno.
La investidura de Maragall, que conformaría un ejecutivo tripartito con las fuerzas que le habían dado apoyo en la investidura, suponía un punto y aparte en la trayectoria presidencial de la Generalitat restaurada. Escenificaba el fin de 23 años de ejecutivos presididos por Jordi Pujol que, como cabeza de lista de Convergència y Unió, había dirigido ininterrumpidamente la Generalitat restaurada desde la constitución de su primer gobierno democrático (1980). La investidura de Maragall también escenificaba la constitución de un Govern inédito en Catalunya, no exento de fuertes tensiones internas, que tendría el máximo exponente en la redacción del nuevo Estatut del 2006.