Tal día como hoy del año 1936, hace 83 años, en el contexto de las semanas inmediatamente posteriores al estallido de la Guerra Civil española (1936-1939), las milicias republicanas comandadas por el coronel Ildefons Puigdengolas, perdían la batalla del asedio franquista sobre Badajoz, y las tropas rebeldes dirigidas por el teniente coronel Juan Yagüe entraban en la ciudad. Durante las horas que siguieron a la ocupación de Badajoz, el general rebelde Yagüe ordenó la detención, reclusión y asesinato de todas las personas que habían participado en la defensa republicana de la ciudad. Aquella maniobra se saldaría con el asesinato de más de 4.000 personas, y Yagüe se ganaría el sobrenombre de "El Carnicero de Badajoz"
Todos los medios internacionales se hicieron eco de aquella masacre. El mismo día de los hechos Jacques Berthet, relataba por Le Journal de Geneve, "...hemos visto la acera de la Comandancia Militar empapada de sangre (...) las calles de la ciudad están cubiertas de cristales, de tejas y de cadáveres abandonados (...) sólo en la calle de San Juan hay trescientos cuerpos. Alrededor de mil doscientas personas han sido fusiladas". Y al día siguiente, Mario Neves, relataba para el Diario de Lisboa que "durante toda la tarde de ayer y toda la mañana de hoy continúan las ejecuciones en massa en Badajoz (...) se estima que el número de personas ejecutadas ya sobrepasa las mil quinientas".
Después de los hechos, en una entrevista que Yagüe concedió a John T. Whitaker, del New York Herald Tribune, declaró “Por supuesto que los matamos. ¿Qué esperaba usted? ¿Que iba a llevar 4.000 prisioneros rojos conmigo, teniendo mi columna que avanzar contrarreloj? ¿O iba a soltarlos en la retaguardia y dejar que Badajoz fuera roja otra vez?". Poco después (30 de agosto) Jay Allen, del Chicago Tribune, preguntó a Franco sobre la masacre de Badajoz. En aquella entrevista Franco declara “Salvaré a España del marxismo a cualquier precio”. Allen, sorprendido le pregunta: “¿Significa eso que tendrá que fusilar a media España?. I Franco respon “He dicho a cualquier precio”.
El coronel Ildefons Puigdengolas (Figueres, 1876) moriría pocas semanas después (31 de octubre) en el frente de Madrid, cuando descubrió un grupo de milicianos que se disponían a desertar. Aquellos mismos milicianos que lo cosieron a tiros.