Tal día como hoy del año 1724, 298 años, a Londres; moría Robert Harley, conde de Oxford y conde de Mortimer; que entre agosto de 1710 y junio de 1711 había sido Canciller de Hacienda del gobierno británico. Durante su mandato, la cancillería de Hacienda británica impulsó una durísima campaña contra los gastos de guerra que, hasta aquel momento, el ejército británico había empleado en el conflicto sucesorio hispánico. Pocos meses después de su nombramiento (noviembre, 1710), Harley compareció en la Cámara de los Comunes y presentó un déficit de nueve millones de libras, que atribuyó a la participación británica en el conflicto sucesorio hispánico; y creó un complejo sistema de deuda pública que se convertiría en una gigantesca estafa.

Harley, era un miembro del estamento nobiliario inglés y su familia había luchado en el campo de batalla por el restablecimiento de la monarquía en perjuicio del régimen republicano de Oliver Cromwell. Pero no tuvo nunca la confianza de los tory, el partido conservador a las instituciones británicas. A pesar de todo, la intensa campaña que había desplegado desde la cancillería, tendría unos efectos muy negativos para la alianza internacional austriacista. Harley cesó como ministro de Hacienda en junio de 1711; pero continuó vinculado al grupo de presión que maniobraba para conseguir que Gran Bretaña abandonara aquella alianza internacional; y en marzo de 1713 ejerció un papel relevante en las conversaciones de paz de Utrecht (Paisos Baixos), entre británicos y franceses.

Cuando el rey Jorge I fue coronado (1714) cambió la suerte de Harley. Los wigh (los liberales) habían desbancado a los conservadores del gobierno; y el nuevo rey era partidario de mantener el Tratado de Génova (1705) firmado entre Inglaterra y el partido austriacista catalán. Pero Barcelona ya había caído en manos de los borbónicos, y en aquel momento, Jorge I ordenó una investigación que precipitó el procesamiento de Harley, acusado de gobernar en beneficio propio y del grupo de presión que representaba. Pasó dos años recluido en la Torre de Londres. Después de aquel episodio quedó apartado de la actividad política. Y después de la quiebra de la Compañía del Mar del Sur (1720), que era el entramado que había creado para generar la deuda pública (1711); se apartó completamente de la vida pública.