En el 2019, Francina Armengol consiguió ser la primera candidata del PSIB-PSOE en ganar unas elecciones a las Illes Balears. Eso le permitió un segundo mandato en coalición con el partido ecosoberanista Més per Mallorca y Unides Podem. Aquella victoria histórica de la primera presidenta de las Illes Balears no parece que se tenga que repetir este 28-M. A pesar de que alguna encuesta sitúan ganadora en Armengol, otros la dejan en segunda posición por detrás de un PP que experimenta una mejora importante después de su porrazo electoral en el 2019, con el liderazgo renovado de la exdiputada en el Congreso, Marga Prohens. Este hecho pone en duda que Armengol pueda encadenar su tercer mandato consecutivo al frente de un tripartito, que podría tener que abrirse a todavía más fuerzas políticas.
Lo que parece claro es que ni la una ni la otra podrán gobernar en solitario. Armengol está acostumbrada, después de ocho en los que ha tenido que hacer equilibrios y en los que se ha enfrentado a sus socios por cuestiones de vivienda y también de protección de la lengua catalana en el archipiélago. Ahora bien, Marga Prohens tendría que tragarse el sapo de gobernar con Vox, después de que el partido de ultraderecha haya pasado de aceptar dar apoyo externo al PP a exigir entrar en los gobiernos autonómicos —aunque quieren suprimirlos— como ya ha pasado en Castilla y León.
Las Balears, uno de los grandes objetivos de Feijóo
Si Pedro Sánchez ha centrado buena parte de sus esperanzas electorales de estas municipales y autonómicas en la candidatura de Jaume Collboni en Barcelona por su lucha particular contra Alberto Núñez Feijóo de cara a las elecciones generales de finales de año, el líder de la oposición se ha fijado en las Illes Balears. Tanto él como varios líderes del PP han acudido repetidamente a las Illes en las últimas semanas para demostrar su apoyo inequívoco a Prohens. Y estos viajes se intensificarán en los próximos días: Feijóo volverá durante la última semana de campaña y también se espera la visita de la secretaría general del partido y compañera de la candidata al Congreso, Cuca Gamarra.
Aunque Pedro Sánchez no ha ido a Mallorca (ni Menorca, ni Eivissa, ni Formentera) desde el pasado mes de octubre, cuando anunció un régimen fiscal por las Illes, sí que está prevista su asistencia en un acto de la candidatura de Armengol el próximo miércoles 17 de mayo. Después de su visita a Joe Biden en la Casa Blanca, que coincide con el inicio de la campaña electoral, el presidente del Govern pasará por la capital mallorquina, mientras que algunos ministros socialistas tendrán actos en el resto de Illes, a veces olvidadas por los líderes estatales. Además, en medio de la polémica por la candidatura de Sumar y el enfrentamiento con la dirección de Podemos, Yolanda Díaz hará campaña por Unides Podem.
Una mayoría de Govern que puede depender de un solo diputado
Aunque las encuestas apuntan al hecho de que la victoria podría recaer en manos del Partido Popular, eso no quiere decir que Marga Prohens consiga desalojar Francina Armengol del Consolat de Mar. Ni siquiera llegando a un pacto con Vox, del cual la popular intenta rehuir, defendiendo que prefiere un "Govern estable en minoría". Según las últimas encuestas, el PP se haría con 22 de los 59 escaños, una cifra muy lejana a la mayoría absoluta que no obtendría ni siquiera sumando a los 6 diputados de Vox que las encuestas dan a Vox. Mientras tanto, los 5 diputados de Ciutadans desaparecerían del Parlamento de las Illes Balears, tal como está previsto que suceda a buena parte del Estado después de estas elecciones.
El desgaste electoral de Francina Armengol después de ocho años al frente del archipiélago provocaría la pérdida de dos escaños, obteniendo solo 17. Més per Mallorca se mantendría en 4 escaños, pero Unides Podem también perdería a dos representantes, quedando en solo 4, hecho que complica revalidar el tripartito que ha gobernado las Balears en el último mandato y se necesitaría también el apoyo de alguna fuerza minoritaria, como Més per Menorca, que sí que vería mejorar sus resultados de 2 a 3 diputados.
Las polémicas de la precampaña
En estos meses de precampaña y desde que se ha convertido en candidata del PP, Marga Prohens ha ganado presencia en los medios de comunicación, hecho que a veces le ha jugado en contra. Como, cuando tildó de "tontería" el hecho de cambiar las camas de los hoteles por unas que fueran elevables, como medida para facilitar el trabajo a las "kelly". Estas palabras fueron objeto de crítica e incluso las ministras Yolanda Díaz e Irene Montero salieron a lamentar estas declaraciones. También fue noticia cuando se reunió en una comida con José Luis Rodríguez, mano derecha de Jaume Matas y exdirigente popular condenado por corrupción. Incluso desde la dirección estatal del partido criticaron este encuentro y ella tuvo que reconocer que había sido un error. En las últimas semanas, se ha sabido que el marido de la candidata será el número dos de la candidatura popular en el Ayuntamiento de Palma, hecho que también ha sido censurado por el resto de partidos.
Tanto Armengol como Prohens afrontan esta campaña con posibilidades de convertirse después del 28 de mayo en presidentas de las Balears: una por primera vez, la otra lo sería por tercer mandato consecutivo. La gran problemática de la vivienda, con la derecha intentando poner el foco sobre las ocupaciones mientras el PSIB saca pecho de la ley de la vivienda de Sánchez será uno de los grandes puntos de debate, sumado también a la masificación turística o la lengua.