Sílvia Orriols, la alcaldesa de Ripoll y cara visible de Aliança Catalana, ha conseguido el objetivo que se propuso cuando Pere Aragonès convocó elecciones y ha irrumpido en el Parlament de Catalunya. El partido independentista, identitario e islamófobo ha conseguido un diputado por Girona, donde se presentaba Orriols, y también un diputado por Lleida. En todo el país han sumado 118.302 votos, a la espera de cerrar definitivamente el escrutinio, al que esta mañana de lunes le falta todavía un 0,5%. Aliança Catalana ha cumplido parte de los objetivos del partido, que era asaltar el Parlament, pero lo ha hecho con menos fuerza de la prevista y sin conseguir representación ni en Tarragona, donde la abogada maspujolenca Aurora Fornos era la cabeza de lista, ni tampoco en Barcelona, donde el empresario Lluís Areny era el número 1, pero donde la candidatura llevaba a dos de los hombres fuertes del partido fuera del bressol de Catalunya, Jordi Aragonès (número 2) y Oriol Ges (número 3). Ramon Abad, exmilitante de Esquerra, ahora jubilado, será el segundo diputado, el que el partido identitario ha conseguido por la demarcación de Lleida.
🔴 Elecciones Catalanas 2024, DIRECTO | Reacciones de los partidos y posibles pactos
La irrupción que pronosticaban todos los sondeos, con estos dos diputados, aunque la dirección esperaba más escaños en el Parlament de Catalunya, ha abierto preguntas sobre el futuro de este movimiento, al que mucha gente ha calificado de extrema derecha, y también sobre el futuro inmediato de Orriols y el control del partido. ¿Como luchará Aliança Catalana por un "Estado libre, próspero, seguro y occidental", tal como dijo anoche Orriols cuando salió de la sede del partido en la calle de Sant Jaume de Ripoll y se dirigió a la prensa?
Aliança Catalana, ¿y ahora qué?
Una de las preguntas obligadas es 'y ahora qué?'. Ahora Sílvia Orriols será diputada en el Parlament de Catalunya, pero no podrá liderar un grupo parlamentario y tendrá que compartir presupuesto, despachos y tiempo de intervención con la CUP, que también se han quedado a las puertas de obtener grupo. El Grupo Mixto acogerá a los dos extremos de un arco parlamentario pendiente de los pactos para saber quién será el presidente de la Generalitat. Los presidentes de los grupos parlamentarios disponen de vehículo oficial con conductor; habrá que ver si se alcanza algún pacto entre Aliança y la CUP. También habrá que repartir los cargos de confianza que el Grupo Mixto podrá contratar para trabajar en el Parlament.
Por su parte, Sílvia Orriols ya ha anunciado que no dejará la alcaldía de Ripoll. Justo al acabarse el escrutinio, y después de confirmarse los dos diputados y que en la capital del Ripollès sumó más votos que en las elecciones municipales de mayo de 2023, sacó pecho y aseguró que los ciudadanos la habían "revalidado". Orriols compaginará la alcaldía con el cargo de diputada en Barcelona.
La elección de Orriols de presentarse por Girona ha funcionado. Desde el partido aseguran que fue la propia alcaldesa quien lo pidió, lejos de los cálculos electorales. Pero no esconden que los ideólogos del partido sabían perfectamente que con el adelanto electoral, y el poco tiempo para hacer campaña, y teniendo en cuenta que Aliança Catalana no tenía cuota de pantalla y era un partido, hasta ayer, extraparlamentario, donde tenían más posibilidades de entrar era por las comarcas de Girona, como ha acabado siendo, y presentar a Orriols por Barcelona habría podido dejarla fuera del Parlament. En Lleida han sido quinta fuerza y en Girona, cuarta, en ambos sitios por delante de la CUP y Vox. En la demarcación de Girona se han quedado a poco más de 2.000 votos del segundo diputado. En Tarragona y en Barcelona, en cambio, es donde han hecho peor papel. En las comarcas de Barcelona les han faltado más de 10.000 votos para poder conseguir tres diputados y realizar el asalto con cinco diputados.
El partido quiere muscularse
Aliança Catalana es un partido municipalista que, ahora, ha dado el salto al Parlament de Catalunya, pero más allá del bloqueo informativo que los candidatos han denunciado durante la campaña y de los pactos de los partidos parlamentarios por evitar un acuerdo con ellos, necesitará ahora fundarse y saber qué tipo de partido quieren ser. Los estatutos del partido están desactualizados y se elaboraron al inicio del partido; muchas de las personas que forman parte de la dirección formal del partido ya no forman parte de Aliança Catalana y los liderazgos se han renovado.
El partido ha pasado en pocos días de 40 militantes, en Ripoll, a más de 400 por todo el país, explicaban ayer desde la dirección del partido a ElNacional.cat. En las próximas semanas habrá que organizar un congreso fundacional para poner las bases del partido y organizar una de las patas más débiles de Aliança Catalana, la estructura territorial. El objetivo de los líderes ideológicos del partido, como Jordi Aragonès, pasa por muscular el partido para esta etapa post-procés y cuando el electorado ha castigado a los partidos que en el año 2017 fueron los artífices del referéndum del 1 de Octubre y de la declaración fallida de independencia.
Desde Aliança Catalana se quiere muscular y profesionalizar el partido, formar a la militancia y blindar el partido de oportunistas, friquis e infiltrados, uno de los problemas de estos partidos, que pueden experimentar crecimientos muy rápidos después de jornadas electorales donde consiguen representación. El partido tendrá que decidir cómo quiere organizarse y si Orriols, alcaldesa de Ripoll y candidata, mantendrá el liderazgo de la organización que ahora preside, o si el partido da un viraje hacia un modelo PNV, donde la dirección ideológica y estratégica tiene más poder que los candidatos y cargos electos. Fuentes del partido aseguran que existen varias almas, pero que, de momento, no hay pugnas de poder y que todo el mundo, oficialmente, rema hacia el mismo objetivo.
Los errores de la campaña del 12-M
¿Dos diputados son muchos o pocos? El debate está servido. Las encuestas y la militancia esperaban más. Algunos de los sondeos de este mismo domingo elevaban hasta seis diputados los resultados de Aliança Catalana, en la parte alta de la horquilla. La dirección del partido también esperaba más, empujados por la burbuja de los sondeos y de Twitter, pero rápidamente cerraron filas. Dos diputados es un buen resultado, aseguran. Entrar es un buen resultado. Aunque, evidentemente, no pueden forzar ningún Govern, por la aritmética parlamentaria y también por haberse quedado a las puertas de Barcelona y del segundo por Girona. Las subvenciones electorales y los cargos de confianza deben jugarse con habilidad, aseguran desde el partido.
Pero con los pocos recursos y el supuesto apagón informativo que han denunciado durante la campaña, los líderes del partido, también Sílvia Orriols, celebran los dos diputados. Los quince días previos a las elecciones toda la acción se ha centrado en las redes, lo que sumado a la poca capacidad territorial, ha llevado al partido a cometer errores y a discrepancias internas, de carácter personalista, que la nueva estructura del partido y el blindaje de los espacios de poder tendrá que evitar de cara a las nuevas campañas que pueda afrontar este partido de nueva hornada post-procés.
Músculo también ideológico
Más allá de la organización del partido, el congreso fundacional también servirá para aclarar la estrategia ideológica del partido. En estas elecciones, como la campaña, el programa tuvo que hacerse a toda prisa, y la musculatura del partido también permitirá definir mejor la estrategia en este sentido. Sin embargo, el programa electoral de Aliança Catalana en este 2024 era extenso en capítulos, pero de poca profundidad. Sobre la independencia, uno de los puntos clave, el partido de Orriols aseguraba que alcanzar un estado es el objetivo y que había que preparar al país "para la secesión" por la vía "de establecer contactos internacionales con otros estados, dando imagen de país soberano distinto a España, reduciendo la deuda de la Generalitat, aumentando nuestra soberanía energética, mejorando nuestra soberanía alimentaria, promoviendo nuestra independencia financiera y fomentando que nuestro tejido empresarial y productivo esté en manos catalanas".
En cuanto a la inmigración, el partido asegura que "en Catalunya no cabe todo el mundo" y que hay que endurecer las medidas, cerrar fronteras, aplicar la ley de Extranjería y "promoveremos la integración de los inmigrantes legales a la lengua y cultura catalanas". En seguridad también se quería ampliar el número de agentes del cuerpo de Mossos d'Esquadra y mejorar su coordinación con las policías locales. Aliança Catalana también defiende el turismo, el mundo rural y, entre otras propuestas, reformular el mapa mediático catalán de TV3 y Catalunya Radio.
El congreso fundacional y la estructura que salga será clave también para muscular ideológicamente el partido para prepararlo para unas nuevas elecciones y también para gestionar la batalla cultural que Orriols, casi en solitario, tendrá que librar en el Parlament de Catalunya contra el progresismo y la superioridad moral de la izquierda si acaba arrancando esta nueva legislatura. Cabe recordar que Salvador Illa, el candidato del PSC, no lo tiene fácil para hacer Govern con una mayoría estable y nadie descarta, a dia de hoy, una repetición electoral.
Sin apagón informativo
Orriols lo dijo justo después de acabar el escrutinio de este domingo por la noche. Aliança Catalana, aseguran, no es un partido efímero, y su intención es seguir presentándose a las elecciones al Parlament de Catalunya. Haber entrado con dos diputados rompe, en los medios públicos, el apagón informativo que el partido ha sufrido durante la campaña de este 12-M. Si bien hay alguna posibilidad para saltarlo, la mayoría de medios de comunicación han optado por no hacer seguimiento de la campaña de un partido que, hasta este domingo, era extraparlamentario. Ahora, sin embargo, siendo ya un partido con un pie en el parque de la Ciutadella, los medios públicos tendrán que invitar a Orriols a los debates en las próximas elecciones, ya sean en octubre, si hay repetición, o dentro de cuatro años, cuando se agote la XV legislatura.
Síliva Orriols explicó a sus seguidores, en el local de campaña en el centro de Ripoll, que el crecimiento en el Ripollès, ganando en municipios próximos a Ripoll, es el ejemplo de que la gente confía en su partido cuando los conoce, y que ahora haber conseguido entrar en el Parlament les permitirá expandirse como han hecho en la cuna de Catalunya. La alcaldesa, esta mañana, antes de las ocho, ya estaba en el Ayuntamiento. "Me siento como si hubiera vuelto a ganar las elecciones municipales", ha asegurado la batllesa.