El candidato de Junts a las elecciones al Parlament de Catalunya del próximo 12 de mayo, Carles Puigdemont, ha apostado por que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, siga en su cargo si está dispuesto a conseguir un "acuerdo histórico" con Catalunya. En una entrevista de Europa Press, ha afirmado: "Si hay un primer ministro que se llama Pedro Sánchez y está dispuesto a llegar a un acuerdo histórico con Catalunya, me interesa que siga. Pero se llame Pedro Sánchez o se diga cómo se diga".
Aunque dice que podría tener "mucha empatía personal con el esposo, con el hombre,", y que podrían coincidir en muchas cosas, ha recalcado que él tiene que negociar con Sánchez como presidente del Gobierno. "Si está dispuesto a mantener el compromiso al cual tenemos que llegar y llegar hasta el final, no tenemos inconveniente, pero decidiremos siempre con quién negociamos en función de los cumplimientos. Si se cumplen las cosas, cumpliremos", ha advertido.
Puigdemont ha reiterado que Sánchez debería presentar una cuestión de confianza si cree que su presidencia está debilitada, porque es en el Congreso donde todos podrán pronunciarse. Preguntado por si Junts per Catalunya daría apoyo a Sánchez, el president en el exilio ha pedido literalmente ir paso a paso porque quiere aprovechar las oportunidades que se abren: "Muchas veces, las crisis del sistema político español han representado oportunidades para el sistema político catalán". Ha insistido en que quiere una relación bilateral con el Estado para conseguir un acuerdo que resuelva el conflicto político entre Catalunya y el Estado, y decidirán "siempre" sus votos en función de eso.
Descarta que la amnistía decaiga
No ve en riesgo la Ley de Amnistía si Sánchez dimite, ni por calendario ni por oportunidad, pero ha dejado claro que Junts tampoco decidirá su actuación en Madrid "en función de una ley que ya está en su trámite final". Además, ha mantenido su compromiso de volver a Catalunya para el debate de investidura, aunque decaiga finalmente la amnistía. Aun así, cree que no decaerá.
En cambio, Puigdemont sí que se ha mostrado sorprendido por las razones de Sánchez para tomarse 5 días de reflexión ante "unas acusaciones que no tienen ningún fundamento", pero ha evitado especular sobre el motivo y sobre qué puede pasar si sigue o dimite. Por eso, ha rechazado pronunciarse sobre si la decisión de Sánchez está relacionada con su posible aspiración a ocupar cargos en Europa después de los comicios del 9 de junio o si está para la reapertura del caso Pegasus ante la información proporcionada por las autoridades francesas, entre otras cuestiones.
Apuesta por seguir negociando con el PSOE
Aunque dimita Sánchez, opina que no comportaría necesariamente romper negociaciones con el PSOE en el marco del mecanismo de verificación internacional, porque querrán seguir gobernando: "Y si quieren seguir gobernando en España, ahora mismo se tienen que entender con nosotros a toda costa, o no gobiernan España". "Si a quien tenemos delante es Pedro Sánchez, no tengo ningún problema. Pero si el que tenemos es otra persona y cumple, y redoblamos la apuesta y aprovechamos la oportunidad, tampoco tendría ningún problema", ha dicho.
Según Puigdemont, si uno se pone a dirigir un país es porque tiene el carácter de liderar y asumir las consecuencias y los riesgos, y no ha querido entrar en los detalles de lo que representó para él ser president: "No lo he hecho en 6 años y medio, no lo haré ahora". "Pero si necesita algún consejo de cómo se vive en situaciones extremas, perseguido y espiado por tus condiciones políticas, embadurnado por dosieres inexistentes, yo le podría hacer un máster", ha añadido.