El sorpasso del PP a Vox refuerza a Feijóo para enfrentarse a Sánchez, que “depende más” del independentismo

Satisfacción en Madrid por los resultados del Partido Popular en las elecciones catalanas con Alejandro Fernández al frente. A pesar de la pugna en la elección del candidato y de las diferencias que han verbalizado en más de una ocasión Fernández y Alberto Núñez Feijóo, los populares, que partían de la última posición, celebran que han sido el partido que más sube y consiguen multiplicar por cinco a los diputados. Desde Génova, el PP español ve estos resultados como una “fantástica noticia” y saca pecho de haberse llevado votos constitucionalistas de personas que en 2021 apostaron por el PSC y que ahora “creen que el PSC ya no lo es”. Fuentes próximas a la dirección del partido apuntan que los socialistas “han pagado un peaje ideológico muy grande” por la “evolución” de su discurso, asimilándolo al de ERC, y ponen de relieve que estos apoyos han ido ahora hacia el PP. La secretaria general del partido, Cuca Gamarra, ha subrayado que “el PSOE es hoy más dependiente del independentismo de lo que era ayer” y que el futuro de Sánchez depende hoy más del independentismo de lo que dependía ayer”. A través de X, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha felicitado a Alejandro Fernández por un resultado “extraordinario” que ha “superado” las “mejoras expectativas” y que “consolida con claridad” a los populares como la “alternativa constitucionalista”.

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📝 Alejandro Fernández sitúa al PP como cuarta fuerza con 15 escaños y supera a Vox con creces

Desde Génova trazan una línea de continuidad que se remonta a la etapa de Alicia Sánchez-Camacho al frente del PP catalán. Los populares alegan que han recuperado el voto no independentista y constitucionalista que obtuvieron en 2010 y en 2012, que se marchó primero a Inés Arrimadas (en 2017) y después a Salvador Illa (en 2021). Es un voto que “ha considerado que el PSC ha abandonado el marco constitucionalista” y que ahora vuelve a “espacios previos”. También subrayan el “mérito” de conseguir esto teniendo a un Vox con mucha fuerza. Así pues, el PP se felicita por haber conseguido el cuarto mejor resultado de la historia en Catalunya: Alejandro Fernández no ha llegado a los diecinueve escaños de 2012 ni a los dieciocho de 2010, los dos firmados por Sánchez-Camacho, pero friega los diecisiete de Alejo Vidal-Cuadras en 1995 e iguala los quince de Josep Piqué en 2003.

En una breve comparecencia frente a los medios de comunicación, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha reprobado que el PSC “haya jugado a asimilarse con el independentismo” y, en cambio, “no haya conseguido lo que quería”, dado que “su futuro está ahora más que nunca en manos del independentismo”. Y ha añadido, en la línea de lo que expresó Feijóo hace unos días, que el Govern de Catalunya “no lo decidirá el PSC”, sino el independentismo, que “volverá a ponerle un precio”. Voz próximas a la cúpula del PP no perciben que haya crecido la estabilidad política tanto en Catalunya como en España. “Más bien el contrario”, señalan fuentes de Génova. Consideran que el hecho que Junts esté a la oposición al Parlament de Catalunya será muy caro para Pedro Sánchez, ya que los juntaires tendrán más exigencias.

Cuca Gamarra ha puesto de relieve que el PP “ha vuelto a Catalunya para quedarse” con unos resultados que suponen un “punto de inflexión” para la política catalana. Además, la secretaria general ha subrayado que el PP ha crecido en “todas las citas electorales” desde que Feijóo es presidente del partido. Por cierto, durante su discurso, el candidato del PP, Alejandro Fernández, ha querido agradecer “en especial”, el “apoyo extraordinario” de Alberto Núñez Feijóo y la “unidad” con la que han trabajado para un “proyecto absolutamente compartido que significa haber dado a Catalunya un paso de gigante para ser capaces de conseguir el cambio político en España”.

Sin mojarse sobre los escenarios postelectorales y con la mirada puesta en las europeas

Eso sí, desde el cuartel del PP evitan todavía hablar sobre los pactos, pero dejan claro que ellos no han sido “convocados” a la gobernabilidad en Catalunya, sino que son el PSC y los Comunes, que están en el Gobierno, y sus socios, Junts y ERC, los que se tienen que ocupar de ello. Sobre el incremento de votos de los socialistas, fuentes del PP esgrimen que gente que antes votaba ERC ha optado ahora por el PSC porque la “diferencia discursiva” entre las dos formaciones “se ha reducido mucho con el paso de los años”.

A todo esto, en Génova ya comienzan a mirar el horizonte de las elecciones europeas, que se celebrarán el 9 de junio. Fuentes populares aseveran que los socialistas están “expulsando” voto constitucionalista hacia el PP y señalan que, mientras que en Catalunya el PSC “puede tener el salvavidas y el comodín del independentismo”, esto no ocurre en otros territorios. “Se ha constado que el PSOE envía voto de centro al PP, esta batalla por el centro le estamos ganando y el PP es más fuerte que antes”, concluyen estas voces.