La entrada en la Eurocámara del agitador ultra Alvise Pérez es una de las sorpresas que ha dejado el recuento de las elecciones europeas de este domingo. Según el recuento definitivo, la agrupación de electores que ha creado para estos comicios con el nombre Se acabó la fiesta (SALF) ha conseguido tres representantes en la cámara y casi 800.000 votos. Con este resultado, Alvise posiciona en sexta posición, por detrás del PSOE, el PP, Vox, Ara Repúbliques y Sumar. Alvise Pérez podía intuir este resultado, ya que el último barómetro del CIS ya le otorgaba uno o dos europarlamentarios.
Luis Pérez Fernández, más conocido como Alvise Pérez, es un analista y consultor político que ha trabajado para Ciudadanos en el Parlament valenciano. Allí hizo de asesor parlamentario y de jefe de gabinete de la formación españolista. También ha estado vinculado a UPyD, Unión Progreso y Democracia. Pero por lo que es realmente más conocido es por su difusión de contenidos a través de internet, concretamente en X (antiguo Twitter) y Telegram. Alvise Pérez aspira a competir con la ultraderecha de Vox.
Las primeras relaciones con la política
Nacido en Sevilla en 1990 (34 años) Alvise Pérez se afilió como voluntario a UPyD durante su etapa universitaria porque consideraba que "era el único partido a nivel nacional que podía romper el bipartidismo". Con 22 años se trasladó a Leeds (en el Reino Unido) para trabajar en el departamento de comunicación del Instituto Cervantes, fue entonces cuando se convirtió en delegado internacional de Liberal Youth, la sección joven de los Liberales Demócratas británicos.
A finales de 2017 se afilió a Ciudadanos y empezó a trabajar para el partido en las Corts valencianas, que en aquel momento estaba liderado por Toni Cantó, pero dejó el partido a finales de 2019 cuando Ciudadanos vivió una derrota electoral. Ahora, este 2024, anunció que se presentaría a las elecciones en el Parlamento Europeo con un partido que tuviera como base "la anticorrupción".
Fake news
Su difusión de fake news a través de sus canales, lo ha llevado a afrontar varios procesos judiciales. En una ocasión acusó a la exalcaldesa de Madrid, Manuela Camena, de haber llevado a su casa un respirador durante la pandemia por la covid, juicio que perdió. Otro procedimiento que tiene pendiente es por difundir una falsa PCR de Salvador Illa, cuando era ministro de Sanidad.
Por el contrario, el actual ministro de Transportes, Óscar Puente, vio cómo se archivaba una denuncia que había interpuesto contra Alvise por un delito continuado de calumnias con publicidad y amenazas. En aquel momento, Puente era alcalde de Valladolid y llevó a Alvise a los tribunales por la publicación de diferentes informaciones y cometarios. La justicia consideró las críticas del ahora candidato a las europeas por Se acabó la fiesta dentro de "el ejercicio de la libertad de expresión".
Su estrategia de publicar noticias falsas le ha hecho ganar fama (hasta el punto de obtener las firmas necesarias para presentarse a las europeas) aunque, en noviembre de 2020, Twitter le bloqueó la cuenta que tenía con 200.000 seguidores. Ante eso, Alvise hizo un llamamiento a manifestarse delante de la sede de Twitter en Madrid y decenas de personas acudieron a la cita. Alvise defendía que se lo estaba censurando por sus ideas y no por difundir mentiras.