La biblioteca de Borriana ha sido la patata caliente del debate en siete de las elecciones generales del 23-J. La revista Cavall Fort ha hecho acto de presencia este jueves en el enfrentamiento entre portavoces parlamentarios del Congreso de los Diputados. Ha sido el líder de Esquerra Republicana en Madrid, Gabriel Rufián, quien ha encendido el fuego llevando dos ejemplares de la revista, que ha entregado a la popular Cuca Gamarra y al ultra Iván Espinosa de los Monteros para denunciar la persecución del catalán en el País Valencià desde que el territorio está en manos de la coalición de PP y Vox. Este ha sido el segundo tema que ha generado más crispación en el enfrentamiento en siete, con permiso del referéndum y el conflicto político entre Catalunya y España, además del pactismo con la extrema derecha.
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La delegación independentista catalana ha estado solo representada por Esquerra Republicana. Junts per Catalunya y la CUP no han podido participar en este debate a siete porque no tienen grupo parlamentario propio en el Congreso de los Diputados. "La ciudadanía quizás no lo sabe, pero en el País Valencià PP y Vox prohíben publicaciones en catalán", ha manifestado Rufián para denunciar la persecución de la lengua ante los espectadores de TVE. En el enfrentamiento dialéctico entre el republicano y el representante de Vox se ha tenido que escuchar el diputado de la extrema derecha diferenciar como "lenguas diferentes el catalán, el valenciano, el menorquín y el mallorquín".
Todo este roce para denunciar la persecución del catalán —y del vasco, así lo ha denunciado también Aitor Esteban del PNV— ha formado parte del bloque de política territorial, un fragmento del debate que ha girado en torno al conflicto entre Catalunya y España. Es decir, que se ha tenido que hablar de un referéndum de independencia. La candidata de la alianza entre los comunes y Sumar, Aina Vidal, se ha zafado con éxito de la cuestión, asegurando que el proyecto de Yolanda Díaz pasa porque los catalanes voten algún tipo de consulta, pero se ha negado a responder a las insistentes preguntas de Rufián sobre si en Madrid defenderán un referéndum de independencia.
La misma pregunta ha sido trasladada al socialista Patxi López, que ha defendido impulsar "la política y el diálogo" en Catalunya. Pero allí se ha quedado. Sí que ha defendido la cohesión de todo el Estado: "No nos tenemos que convertir en islas, sino en un continente". Así, también ha condenado al PP por fomentar parte de su estrategia electoral en la confrontación territorial. "Los socialistas hemos arriesgado nuestra vida para defender la pluralidad, la diversidad y las singularidades" del Estado, le ha reprochado a Cuca Gamarra.
Las reuniones del gobierno de Aznar con ETA
Oskar Matute, el portavoz de Bildu, ha denunciado también que el PP y Vox hurguen tanto al PSOE para llegar a pactos con Bildu. Y, en una interpelación directa a la popular Cuca Gamarra, le ha recordado que el Gobierno de José María Aznar se reunió con ETA para poner punto final a la lucha armada vasca. Así, ha denunciado la "hipocresía" que representa que en los años 90 el PP se pudiera sentar con encapuchados y que en el 2023 sea mal visto negociar con un partido político independentista vasco en un hemiciclo como la cámara baja española.
La ley del 'solo sí es sí'
En materia social, la ley del solo sí es sí ha conseguido enfrentar el bloque de la izquierda y la derecha. El PP ha corrido a sacar los datos de rebajas de pena y excarcelaciones de agresores sexuales a cuenta de la norma. "Les importaba más la paz dentro del Consejo de Ministros que la situación de las mujeres", ha criticado Gamarra al portavoz socialista. A su vez, Ivan Espinosa de los Monteros ha desplegado unos folios con los nombres de los centenares de agresores sexuales que se han beneficiado de la ley estrella de Irene Montero. Ha aprovechado también para vincular las violaciones a la inmigración, cosa que Gabriel Rufián ha denunciado, tildándolo de discurso "fascista".
De la misma manera, cuando PP y Vox han aprovechado algunas de sus intervenciones para atacar al portavoz socialista por su pactismo con Bildu, López se ha defendido asegurando que "el único terrorismo que existe hoy día" es el machismo, y ha recriminado a los populares que pacten con "aquellos que lo niegan", en referencia al partido de extrema derecha.
El PSOE y el PP, en busca del voto fronterizo
Ha sido interesante en este debate comprobar que el PSOE, en cierta manera, ha aprendido la lección de la derrota de Pedro Sánchez en el cara a cara con Alberto Núñez Feijóo del lunes. El portavoz socialista, Patxi López, se ha dedicado durante buena parte de sus intervenciones a denunciar las "mentiras" lanzadas por el PP en estos enfrentamientos dialécticos. Ha señalado que los populares han utilizado la técnica del "galope de Gish": centrar el debate en lanzar continuamente falacias.
De la misma manera, el PSOE ha centrado prácticamente todos sus ataques al PP, y también al revés. Los dos partidos mayoritarios han ido en este debate en busca del voto fronterizo, aquel electorado que el 23-J decidirá el futuro de la política española y decantará la balanza de la gobernabilidad en favor de Sánchez o Feijóo. Por parte del PP, Cuca Gamarra ha negado, tal y como hizo durante el cara a cara Feijóo, que "la economía española vaya como una moto". "España está peor que hace cinco años", ha lanzado a la portavoz popular.
El PSOE: "No haremos presidente a Feijóo"
Ante los requerimientos constantes de ERC, el portavoz socialista ha dicho que sus votos "no" servirán para investir a Alberto Núñez Feijóo, tal como ruega el Partido Popular para evitar la dependencia de Vox. En este punto, la izquierda ha situado dos escenarios posibles: un pacto PP-Vox o revalidar la coalición progresista de los últimos cuatro años. Con todo, los populares están convencidos de que conseguirán un "gobierno sólido y en solitario" encabezado por Feijóo. Aun así, con la oferta del PP al PSOE para dejar gobernar la lista más votada, Espinosa de los Monteros considera que el único voto para "derrocar el sanchisme" es el de Vox.