Jaume Collboni ha dado el pistoletazo de salida este jueves desde el barrio del Carmel a su tercera carrera por la alcaldía de Barcelona. En sus primeras elecciones municipales, en 2015, quedó en quinta posición. En las segundas, en 2019, mejoró resultados y llegó a la tercera. En estas se presenta convencido que, con un momento político muy diferente que en los dos últimos comicios, las ganará y que se convertirá después del 28 de mayo en el nuevo alcalde de la capital catalana, después de 12 años sin un alcalde socialista.
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En esta "fiesta" de inicio de campaña, uno de los barrios obreros de la ciudad y feudo socialista barcelonés, Collboni ha estado acompañado por el primer secretario del PSC y líder de la oposición de Catalunya, Salvador Illa, y por la ministra de Hacienda del Gobierno, María Jesús Montero. La andaluza ha sido la primera de diez ministros que acompañarán al candidato socialista, una de las grandes apuestas de Pedro Sánchez en estas elecciones municipales. Los ha presentado la concejala del distrito, Rosa Alarcón, que ha pedido un "alcalde socialista que trabaje por todos los barrios de Barcelona", más allá del Eixample, en lo que es un reproche a la alcaldesa Ada Colau.
Collboni apuesta por una ciudad ordenada, limpia y segura
Recuperando el "hola" olímpico con que Barcelona saludó al mundo en 1992, Collboni ha dado la bienvenida a todos los distritos de la ciudad en este acto de comienzo de campaña, que ha descrito como el inicio de una nueva etapa ante las demandas de cambio: "La ciudad sabe que quien puede garantizar que vuelva los mejores años somos los socialistas. Lo dice todo el mundo". El candidato del PSC, que ha hecho una apuesta para recuperar el orgullo de ser barcelonés durante su parlamento, reivindicando su partido: "El socialismo de Barcelona ha vuelto y es para ganar las elecciones y está preparado para gobernar".
Con la seguridad y la limpieza como principales preocupaciones de los barceloneses, junto con el acceso a la vivienda, Collboni ha asegurado que basará su trabajo si se convierte en alcalde al recuperar una ciudad "ordenada con barrios limpios y seguros. Una ciudad de oportunidades con techos y sueldos dignos", apelando a sus sucesores socialistas: "Cuando se habla de la Barcelona que iba bien, se hace referencia a la Barcelona socialista". Además, ha querido enviar un mensaje de apoyo a los vecinos del barrio de la Bonanova desde el Carmel, en unos "momentos complicados" por la tensión con el movimiento okupa.
Dirigiéndose directamente a sus rivales directos para conseguir la alcaldía en estas elecciones, Ada Colau y Xavier Trias, les ha advertido que su momento ya ha pasado y que ahora es su turno después de "doce años en que Barcelona ha perdido el rumbo". Por eso, ha dejado claro que su compromiso es "pasar página del procés y la decepción", que encarnan según Collboni al candidato de Junts y la actual alcaldesa, respectivamente.
Montero y su amor por Barcelona: "Una ciudad de acogida y donde los andaluces hemos encontrado oportunidades"
Maria Jesús Montero, que ha celebrado que empiece de una vez por todas la campaña electoral y ya se pueda pedir el voto después de una larga precampaña, ha recordado su etapa formativa en Barcelona: "Es una ciudad que me amo profundamente. Yo que vengo del sur, allí siempre hemos admirado Catalunya y Barcelona en particular. Una Barcelona abierta al mundo, a la cultura, en el resto de diversidades, de convivencia, una ciudad de acogida donde los andaluces siempre nos hemos sentido bien tratados y donde hemos encontrado oportunidades de futuro".
La ministra ha hecho referencia a su larga relación con Jaume Collboni, de quien considera que representa "lo mejor de Barcelona". Con todo, también ha aprovechado la ocasión para sacar pecho de algunas de las grandes medidas del Gobierno que ella misma integra, como la subida del salario mínimo pero también las medidas por la sequía, aprobadas este jueves. Por eso, también ha hecho referencia al papel de Salvador Illa en el gabinete de Pedro Sánchez, como ministro de Sanidad, después de que se haya dado por acabada la pandemia. Lo ha contrapuesto a los partidos de la oposición: "Como es posible que en los peores momentos de la sociedad española hayamos tenido un partido que piense que cuanto peor le vaya al país y a los ciudadanos mejor les iría a sus intereses", se ha preguntado en referencia al PP. Aparte de criticar a la derecha española, Montero también se ha fijado en los partidos independentistas, de quien ha criticado que son los que "huyeron del país llevando solo frustración y mentiras", en referencia a los dirigentes en el exilio.
Salvador Illa ve la alcaldía de Barcelona como el paso previo a la presidencia de la Generalitat
Después de Maria Jesús Montero también ha intervenido Salvador Illa, que ha querido dar apoyo al "futuro alcalde de Barcelona": "Hola a la Barcelona inconformista, que quieres ser moderna, orgullosa, ilusionada, que no se pone ningún límite, que acoge, que lidera y que empuja Catalunya". Illa ha defendido que esta campaña que abrirá una nueva etapa, liderada por un alcalde socialista. Para conseguirlo, sin embargo, ha hecho un llamamiento a la movilización "a todos los que quieren un Barcelona que escoge el camino del diálogo, del esfuerzo y que deja el camino de mirarse permanentemente el ombligo".
Así, ha pedido el voto tanto a aquellas personas que en el pasado optaron por candidatos socialistas como aquellos que no lo han hecho nunca. "El voto a la candidatura en Jaume Collboni es el primer paso para poner en marcha Catalunya como presidente de la Generalitat que aspiro a ser". Y desde el escenario del Carmel, no ha dudado a hacer referencia a la presidenta suspendida del Parlament, Laura Borràs o a la problemática de la sequía. Illa hará campaña durante estas dos semanas por todo Catalunya para convertir al PSC en el partido más votado en estas municipales, como lo fue en las últimas elecciones al Parlament.