En verano, en las ciudades más turísticas del mundo, el mayor número de personas no se concentran en las plazas, playas o atractivos turísticos, se concentran en los aeropuertos. Estas infraestructuras gigantes se llenan de riadas de gentes que día tras día llegan y se marchan de las grandes ciudades turísticas. Este ir y venir de gente hace que los aeropuertos escondan una serie de secretos que la mayoría desconocen. Desde la sección veraniega de La Tambuna, te explicaremos algunos que te sorprenderán y te dejarán con la boca abierta.

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Cámaras que te vigilan sin que las veas

Los aeropuertos, cada vez más, están repletos de cámaras de reconocimiento facial. Las cámaras escanean las caras de las personas que están circulando por el aeropuerto y las contrastan con las que tenemos en el pasaporte. De esta manera, en caso de que fuera necesario, se pueden detectar pasaportes falsos. Este sistema de control puede permitir, incluso, detectar delitos o hacer seguimiento de un viajero a lo largo de su estancia en un país.

Equipaje maltratado

Uno de los mayores temores cuando estamos en un aeropuerto es saber si la maleta que hemos facturado llegará al destino que le corresponde o bien si acabará en un aeropuerto en la otra punta del mundo. Cuando nos desprendemos de nuestro equipaje, este empieza un recorrido que lo llevará por varias salas del aeropuerto y pasará de un carro a otro hasta que, con suerte, acabe en la bodega del avión que le corresponde. Son muchos los extrabajadores de aerolíneas que han explicado como se trata este equipaje y todos coinciden en decir que se tira sin ningún tipo de consideración y que se amontona sin cuidado. No es extraño que, una vez llegamos a nuestro destino, nos encontremos con rasguños o golpes en nuestra maleta que no estaban antes de embarcar.

¿Robos?

Según algunos blogs de especialistas en aeropuertos, entre los años 2003 y 2012 en los Estados Unidos se despidieron a 312 funcionarios de seguridad de los aeropuertos del país por robar a los pasajeros. No hay que sufrir, lo más normal es que el personal de seguridad de los aeropuertos sea gente de fiar, sin embargo, como en cualquier sector profesional, hay algunos que te podrían robar. Se han dado casos en que algunos artículos personales de viajeros han desaparecido mientras el equipaje viajaba en la bodega del avión e, incluso, mientras pasaba el escáner del control de seguridad. No es fácil prevenir este tipo de robo, pero una idea podría ser sacar una fotografía del contenido de la maleta antes de salir de casa.

Códigos de barras en todas partes

Cuando facturamos las maletas en el mostrador de nuestra compañía se le coloca un código de barras que tiene como objetivo la identificación automatizada para facilitar la gestión. Sin este código todavía se perderían más maletas de las que ya se pierden. Pero estos no son los únicos códigos de barras que nos acompañan durante nuestra estancia en los aeropuertos, en algunos casos se colocan unos códigos extra en nuestras maletas o pasaporte de los cuales, a veces, no conocemos el significado. Son códigos de seguridad que, en algunos casos, pueden contener información oculta sobre el viajero.