La Costa Brava es uno de los destinos turísticos por excelencia gracias a la belleza de unas calas que enamoran a simple vista. Según datos oficiales del Patronato de Turismo Costa Brava, en 2022 pisaron estas playas 7.357.483 turistas. Esto supone un aumento del 8% con respecto del año 2019, el anterior a la crisis del coronavirus. Este turismo en aumento es la prueba palpable de la magia de unas calas que no puedes dejar de visitar. Desde nuestra Tumbona, la sección veraniega de ElNacional.cat, te aseguramos que nada más verlas querrás quedarte en ellas a pasar lo que queda de temporada.
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5 calas de ensueño en la Costa Brava
Aigua Xelida te invita a hacer snorkel
Esta pequeña cala situada en el municipio de Tamariu no tiene en temporada alta mucho espacio para tomar el sol, pero ofrece unas aguas cristalinas para los amantes del submarinismo y el snorkel. Podrás nadar en ellas, relajarte y dejarte llevar para sumergirte en un lugar de la Costa Brava ideal para refrescarse en verano o darse un buen chapuzón prácticamente durante todo el año, en busca de pulpos, erizos y estrellas de mar.
Cala el Golfet, un espacio virgen
El hecho de que se trate de una playa virgen anima a perderse en ella. Tendrás que recorrer un buen trechito lleno de escalones, pero es la gracia. Conserva su esencia natural en Calella de Palafurgell, un lugar en el que podrás degustar los mejores manjares de la provincia de Girona. No tendrás servicios en la playa o en la cala, preservando de esta manera el encanto del lugar, aunque a veces la gente que va con los yates estropean la paz del lugar.
Cala Es Codolar es una cala pequeña
Tiene solo 100 metros, pero es una de las calas más bonitas de Catalunya. Está a los pies de la impresionante muralla de Tossa, que nos recuerda la historia del territorio. El conjunto forma parte de lo mejor de Tossa Mar, además de buenos restaurantes, cala y muralla son la excusa perfecta para visitar este lugar. Parece sacada de una revista, pero es real, una playa ideal para instagramers que quieran dejar a todos con la boca abierta, la misma boca que se te queda a ti al llegar.
Cala Sa Boadella, para el quiera hacer nudismo en un entorno de lujo
Tomar al sol sin las molestas marcas del bikini o bañador es posible en la cala Sa Boadella de Lloret de Mar. Vas a poder sumergirte sin atadura alguna en una impresionante playa de arena blanca, mucho más íntima que las playas más concurridas de este municipio. No solo podrás hacer nudismo, también acceder vestido y disfrutar de la tranquilidad de este lugar que es prácticamente virgen.
Senyor Ramón, envuelta en acantilados
Esta cala es espectacular, en parte por el acceso a ella un poco complicado en medio de un entorno de lo más natural. No está demasiado masificada lo que es bueno para aquellos que buscan tranquilidad. Se encuentra entre preciosos acantilados y tiene todo lo necesario para hacernos disfrutar de unas aguas turquesas cerca del municipio de Santa Cristina d’Aro. Un lugar al que llegamos en coche y por el que podemos caminar, hacer ejercicio y nadar sin restricciones, en plena naturaleza.
Estas son algunas de las calas más bonitas de la Costa Brava, aunque casi todas las playas de la zona tienen su encanto, su valor, y vale mucho la pena pasar el día en ellas. Eso sí, ¡no se te ocurra hacer en ellas ninguna de estas cosas que están prohibidas en la playa!