Mondas de fruta y verduras, piel de cebolla y ajo, posos de café, papel, restos de lechuga y cáscaras de huevo... escondido en tu basura hay un tesoro verde que puedes rescatar hoy mismo. Te enseñamos cómo hacer abono casero para enriquecer tus plantas de manera ecológica.

El compost casero tiene muchas ventajas: estimula la actividad microbiana del suelo, optimiza la retención de nutrientes y la fijación de carbono, favorece la absorción de agua, aprovecha los residuos orgánicos, promueve la sostenibilidad, y lo mejor es que no tiene por qué costarte un céntimo.

¿Quieres aprender cómo hacer abono casero? Te guiamos paso a paso para que conozcas los ingredientes clave y los consejos que te permitirán convertir tus desechos orgánicos en un valioso recurso para tus plantas. Acompáñanos en este maravilloso viaje de autosuficiencia y sostenibilidad.

Herramientas de compostaje: ¿Qué necesitas?

Para hacer compost casero en casa, necesitarás materiales que te facilitarán el proceso:

  1. Contenedor de compost: Puedes usar un contenedor especial para compostaje o utilizar un barril, una maceta grande, una caja de madera, o cualquier otro recipiente manejable.

  2. Palas o tenedores de compost: Utensilios que te ayuden a mezclar los materiales del compost para asegurar una buena aireación.

  3. Termómetro de compost: No es indispensable, pero un termómetro especial para compostaje te permitirá controlar que la temperatura se mantenga entre los entre 35 y 65 °C. Así evitarás la putrefacción y el olor desagradable.

  4. Acceso al agua: Con la manguera, con regadera, con una botellita llenada en la cocina... sea como sea, necesitarás agua para mantener el nivel adecuado de humedad. 

Cómo hacer abono casero: selecciona lo orgánico. Imagen: Bialasiewicz.

¿Qué residuos puedes usar y cuáles no?

Añade sin miedo los restos de frutas y verduras, plantas, flores, cáscaras de huevo, restos de poda, corcho, papel, cartón, serrín de madera sin tratar, aceite y vinagre (en pequeñas cantidades), posos de café, restos de infusiones y paja. 

Evita agregar restos de pescado, carne y huesos, estiércol de animales domésticos, revistas ilustradas, pañales, serrín de maderas tratadas y otros materiales no orgánicos, ya que pueden causar problemas de olores, atraer plagas o afectar la calidad del compost final.

Crea tu compost casero básico paso a paso

  • Coloca el compostador en un espacio al aire libre que no reciba la luz directa del sol y disponga de techo o tapa para que el compost se mantenga protegido de la lluvia o el viento.

  • Crea la primera capa del compost (unos 30 cm) en este orden: tierra, ramitas, hojas secas o paja. Esta capa servirá para facilitar el drenaje.

  • Es el turno de los desechos orgánicos. Incorpóralos alternando materiales húmedos y materiales secos y trocéalo todo muy bien para acelerar la descomposición. Debe ser una capa de unos 2-3 cm. Tápala con otros 3 cm de tierra. La secuencia debe ser siempre la misma: residuo-tierra-residuo.

  • Remueve el compost cada 3 o 4 días para mezclar y airear las capas. Este paso es muy importante para que se produzca el compostaje.

  • Extracción del compost entre seis y ocho meses. Para saber si está listo debes sentir un olor fresco a bosque y el color debe ser marrón oscuro.

Cómo hacer abono casero: el color y olor del compost son inconfundibles. Imagen: StockFilmStudio.


Ahora ya sabes cómo hacer abono casero con el sistema más básico y económico, y créenos, vas a disfrutar del proceso de transformación de residuos en un abono natural y nutritivo. ¡Es sorprendente cómo la basura puede convertirse en vida!