La idea del huerto urbano es muy atractiva para todos aquellos a los que nos gustan la naturaleza y los cuidados, pero vivimos en entornos urbanos plagados de asfalto y cemento. Pero ¿cómo hacer un huerto urbano en casa sin pifiarla ni desmotivarse a los dos meses?
Lo cierto es que montar un huerto urbano no es difícil, pero si cometemos algunos errores de partida, ya vamos a empezar mal, encontraremos más dificultades, y acabaremos dejándolo. Por eso es importante que sigas estos cinco pasos.
¿Cómo hacer un huerto urbano en casa? Los 5 primeros pasos para evitar los 5 primeros tropiezos
Paso 1: Estudia el espacio
¿Dónde quieres poner el huerto? Dependiendo de tu espacio vas a tener que tirar por unos cultivos u otros, y elegir sistemas distintos. Básicamente, existen tres formatos de huerto urbano en casa:
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Huerto urbano en balcón. La opción más reducida, pero precisamente por ello ideal para principiantes. Tendrás que optimizar mucho el espacio, jugar con muchas macetas, y quizá pensar en algún tipo de huerto vertical. Si te gusta el DIY, es el momento de hacerte con unos palés y montar tu huerto vertical con fresas y hierbas aromáticas. Podrás hacer muchas cosas, pero hay cultivos a los que tienes que renunciar.
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Huerto urbano en terraza. La opción intermedia. Sin la libertad del suelo desnudo, pero con espacio para moverse, para poner jardineras grandes, o lanzarse a una mesa de cultivo (que puede caber en un balcón también, ojo). También tendrás que hacer algunas renuncias, pero tienes más margen de maniobra.
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Huerto urbano en jardín. La opción "deluxe". Espacio y suelo permite cultivar más cantidad, más variedades (como patatas o calabazas), jugar mejor a combinar cultivos, y tener producciones más importantes. También presenta algunos desafíos adicionales.
Tan importante como el espacio disponible es lo iluminado que esté ese espacio. Lo ideal es una orientación hacia el sur con la que aprovechar al máximo el sol, con 8 a 10 horas de luz. Si son menos no pasa nada, hay muchos cultivos que tiran con menos luz, pero debes tener esto pensado y calculado.
Por último, al huerto urbano le conviene poco viento. Si el espacio no está protegido, te conviene cortar o amortiguar el viento de alguna manera.
Paso 2: Elige el modelo de huerto urbano que tendrás y sé realista en tus expectativas
Con lo estudiado arriba, y tus propias inclinaciones, vas a tener que elegir tu modelo de huerto urbano.
Puedes dedicarte a reciclar botellas de plástico y cualquier otro objeto que pueda servir de recipiente y llenar tu balcón de colores y formas surrealistas y con un toque The Last of Us. Puedes tirar a huertos verticales y llenar tus paredes de vida, o repartir macetas y jardineras por toda la terraza, incluso tener un huerto “clásico” con sus tomateras y sus bancales de aromáticas alrededor para evitar las plagas. Todo esto depende de ti.
Pero lo más importante es que seas realista. Producir alimento cuesta. No somos conscientes porque lo cogemos del supermercado, pero cuesta mucho, y producir mucho alimento requiere mucho espacio.
Si tienes un balconcito, no podrás “vivir” de tu huerto urbano, podrás complementar tu dieta con algunas hierbas, hortalizas, lechugas, etc. Si tienes una terraza, las patatas no son prácticas: tardarás mucho en conseguir una cosecha que os comeréis en un par o tres de cenas. Ten esto claro para no desmotivarte, y elige las plantas y hortalizas que mayor producción y rendimiento puedan dar en tus condiciones.
Paso 3: Hazte con los materiales
Anota todo lo que vas a necesitar, y dónde lo vas a guardar. En el vivero o tienda de jardinería encontrarás todo lo que necesitas, además de lo que recicles o tengas por casa, pero, grosso modo:
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Recipientes/macetas.
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Tijeras, pala o paleta, azada, tijeras de poda, rastrillo… depende del tipo de huerto, harán falta unas u otras herramientas de jardinería.
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Regaderas, pulverizadores, y acceso al agua en general.
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Fertilizantes.
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Guantes.
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Un armario o arcón donde meterlo todo.
Paso 4: Elige tus primeros cultivos
Consulta un calendario de siembra para saber qué puedes empezar a plantar en la época del año en la que comiences tu andadura con el huerto urbano, y elige tus primeros cultivos.
Recomendación: comienza por lo fácil. Lechugas, rabanitos o ajos son sencillos de cuidar y pueden darte tus primeras satisfacciones. Y, como dijimos en el Paso 2: sé realista. Plantar cebollas en macetas te dará unas pocas cebollas que te comerás en una semana después de meses de cuidados. Plantar ajos en macetas, en cambio, te dará una producción que se te alargará en el tiempo y tendrá sentido.
Paso 5: ¡Vuélvete un friki de los huertos urbanos!
Ya has comenzado, ahora solo te falta obsesionarte. Lee, aprende y experimenta. Busca experiencias e ideas de otros aficionados, infórmate sobre las variedades de tus plantas favoritas y sus particularidades. Sobre plagas y combinaciones de cultivos. Implementa nuevas y mejores técnicas de riego. Una vez has aprendido cómo hacer un huerto urbano en casa, lo suyo es hacerlo cada vez mejor, ¿no?