Es maravilloso que existan buenos productos comerciales que nos solventen la vida, pero lo cierto es que hay casos en los que sale muchísimo más a cuenta prepararte un apaño casero, y el líquido limpiaparabrisas del coche es uno de esos casos. Como verás a continuación, con unas recetas sencillísimas y muy prácticas podrás fabricar limpiaparabrisas casero y tener tu coche siempre a punto sin gastar ni un euro.
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Y es que tener un parabrisas limpio es clave para la seguridad al volante, por lo que el depósito del limpiaparabrisas no puede quedar nunca vacío. Eso sí, antes de darte nuestras recetas de limpiaparabrisas casero, ¡veamos lo que nunca debes usar para ello!
¿Qué NO utilizar para hacer limpiaparabrisas casero?
Lo primero de todo: no emplees agua sola, y menos todavía del grifo. En primer lugar, el agua sola no va a tener poder limpiador suficiente para dejarte el parabrisas tan limpio como lo necesitas para una conducción segura. En segundo punto, se podrían crear depósitos de cal que obstruyeran el circuito. Y, en tercer parte, el agua sola puede congelarse en invierno si donde vives hace mucho frío, ¡podría estropearse todo el sistema!
Por tanto, nada de agua del grifo, necesitas combinarla con algo. Pero cuidado con emplear compuestos demasiado ácidos o corrosivos, que pueden dañarlo todo.
Las mejores recetas de limpiaparabrisas casero
Combinado de agua y limpiacristales
Pues sí: el mismo limpiacristales que empleas en casa para tus ventanas o las correderas de la terraza puedes emplearlo para el parabrisas de tu coche, que no deja de ser un cristal, ¿verdad? Pero no puedes vaciarlo tal cual en el depósito, tienes que hacer una mezcla: en la botella o garrafa que utilices, pon 1/3 parte de limpiacristales y 2/3 partes de agua.
Esta es la receta más extendida entre la gente que se hace limpiaparabrisas casero, pero es cierto que en ciertas situaciones puede no bastar. A fin de cuentas, el parabrisas de un coche se ensucia más que las ventanas de casa, está expuesto a excrementos de pájaro, mosquitos y otros insectos aplastados, o la resina que va cayendo de los árboles, por citar algunos clásicos.
En estos casos, hay que subir el nivel y añadirle un desengrasante.
Combinado de agua y lavavajillas concentrado
¿Existe algo más eficaz contra la grasa que “el milagro antigrasa”? No hace falta citar la marca comercial que estamos todos pensando, porque hoy día se fabrican lavavajillas concentrados de marca blanca de una calidad excelente y una gran capacidad de arrastre de la grasa y la suciedad en general.
Por ese motivo, el lavavajillas es otra gran opción para hacer limpiaparabrisas casero. Pero mucho cuidado con las proporciones no vayas a pasarte, ¡recuerda que es concentrado! Comienza llenando una botella con 1 o 1,5 litros de agua y échale 2 o 3 gotas de tu lavavajillas. Agítalo bien hasta que esté bien disuelto en el agua, y pruébalo. Si ves que queda corto, la siguiente botella añádele un par de gotas más. Funciona de maravilla, simplemente no te pases o te quedará enjabonado el cristal.
Cómo hacer limpiaparabrisas casero con descongelante
Si en tu zona hace mucho frío en invierno, tienes el coche a la intemperie, y cada mañana tienes que ir con la rasqueta y la botella agua, entonces prueba a añadir esta mezcla a tu limpiaparabrisas casero: 1/2 parte de agua y 1/2 parte de vinagre blanco.
Otra receta común es 1/4 parte de amoníaco con 3/4 partes de agua, pero a mí no me emociona utilizar un producto tan agresivo, y hasta ahora el vinagre me ha servido de maravilla para acabar de eliminar el congelado del parabrisas y poder arrancar sin riesgo de no ver nada.
Te asombrará el resultado que dan estas recetas tan fáciles. A veces tenemos todo lo relacionado con el coche un poco mistificado, como si cada producto necesario fuera algo muy especial y exclusivo, pero ya ves que al menos en lo tocante al parabrisas, con elementos muy sencillos, puedes crear un excelente limpiaparabrisas casero y tenerlo reluciente y perfecto.