¿Sabías que el aguacate es, formalmente, una baya? Y una delicia. Es suave al paladar, regula el colesterol y tú no puedes vivir sin esta maravillosa mantequilla vegetal. Te fascina tanto que te gustaría saber cómo plantar aguacate, pero quizás hayas oído que, aunque el árbol crece rápido, tarda entre 5 y 10 años en dar fruto. ¿Es esto cierto?
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Bien, el caso es que sí. Plantar aguacates en casa requiere paciencia. Pero hay maneras de acelerarlo un poco y, en fin, ¿por qué no esperar? Lo único es que tendrás que seguir comprando aguacates durante unos años más... cosa que harías igual si NO lo plantaras. Por tanto... ¡Aprendamos cómo plantar aguacate en nuestro huerto urbano!
Cómo plantar aguacate y que no se te mueran en el intento
Antes de explicarte cómo plantar aguacate es importante que consigas aguacates maduros, vigila que no estén secos ni pasados, pero sí deben estar en su punto para que la semilla salga sin esfuerzo. ¿Ya los tienes? Bien, selecciona los que quieras germinar y sácales la semilla. Ahora vamos a enseñarte un método que funcionan de verdad. ¡Germinarán en 20 días!
El método del bote con el que ahorrarte los palillos
Tal vez conozcas el método de los palillos para germinar las semillas de aguacate, porque es el método que emplea casi todo el mundo, en casi todos los videos de youtube o artículos al respecto. Pero déjanos enseñarte un método mucho más efectivo y rápido.
Solo tienes que seguir estos pasos:
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Lava muy bien las semillas de aguacate para evitar su putrefacción.
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Déjalas secar al sol dos horas.
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Consigue un bote mediano redondo, vacío, de plástico y con tapa, los de aceitunas aliñadas son geniales.
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Coloca las semillas de aguacate en el bote, llénalo de agua y déjalo reposar otras dos horas pero a la sombra.
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Retira la capa marrón de las semillas con cuidado.
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Vuelve a colocar las semillas en el bote y llénalo de agua. Déjalo esta vez reposar durante 3 días.
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Descubrirás que los huesos se han abierto y habrá empezado el proceso de germinación.
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Busca una maceta grande y añade tierra ya preparada que encontrarás en sitios especializados. Entierra las semillas por la parte más plana hacia abajo y deja una separación de 6 centímetros entre las semillas. Asegúrate que la tierra les cubre hasta la mitad.
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Riégalas todos los días e intenta que se mantenga húmeda la tierra (sin encharcarla) procura que no le dé el sol directo si hace mucho calor.
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En veinte días ya habrá germinado y en dos meses estará listo para que lo trasplantes a tu jardín.
Cómo cuidar el aguacate una vez trasplantado para que dé frutos
Piensa que las raíces del aguacate son profundas, por lo que si no lo plantas directamente sobre el suelo, necesitarás una maceta grande, pero sobre todo, profunda, más estrecha que ancha. Dicho esto, el cuidado ya no tiene más misterio: hay que regar de forma regular, sin encharcar la tierra pero manteniéndola húmeda. Considera un acolchado.
El aguacate requiere sol, pero tampoco en exceso, y la luz indirecta también le sirve bien. Por lo demás, cuando veas que comienza a estirarse demasiado, tendrás que despuntarlo, es decir, podarlo por la parte superior. Esto se hace para que haga crecer las yemas laterales de forma que el árbol se ensanche con ramas, ya que si no saldrá "recto" hacia arriba y ni rinde para dar frutos, ni es fácil cogerlos luego.
Y durante unos años, esto va a ser todo: tener un bonito árbol en casa que iremos regando, nutriendo con abono de vez en cuando, y viendo crecer. A partir del quinto año, (o cuarto, o incluso menos, si es de la variedad Hass) debería empezar a dar algún fruto. Si siguen pasando los años y ves que no, puede que sea porque es de las plantas que no dan fruto. En ese caso, te tocará hacerle un injerto de otro que sí los dé.
A diferencia de otros cultivos de tu huerto, el aguacate no es rápido, no será "plantar y comer". Pero si tienes paciencia, suerte y maña, dentro de unos años estarás comiendo tus propios aguacates y no necesitarás comprar ni uno más en el supermercado. Que, vistos los precios y la crisis climática, casi será lo mejor.
Por cierto, te contamos algo curioso. ¿Aguacate? ¿Por qué se llama así? El origen de su nombre viene del vocablo ahuacatl que en la lengua mexicana, náhuatl, significa “testículo”. O sea que cuando dices que te estás comiendo una ensalada de aguacate, ¡pues a un náhuatl le sonará raro raro! Y ahora que ya sabes cómo plantar aguacate, te dejamos también algunos consejos adicionales para el consumo de su carne... ¡o de su semilla!