Actualmente, muchas profesiones requieren pasar largas horas en una silla. Aunque pueda parecer una actividad inofensiva, estar sentado durante un largo periodo de tiempo es perjudicial a la salud y, además, si no cuidamos la postura y no sabemos cómo sentarse correctamente, aumenta el riesgo de sufrir lesiones lumbares y cervicales. Este fenómeno, conocido como "efecto silla", hace referencia a las consecuencias negativas de mantener una postura prolongada e inadecuada en una silla no ergonómica. Para evitarlo, es importante aprender a cómo sentarse correctamente en el trabajo. Te presentamos algunos consejos clave para proteger tu espalda y cuello y mejorar tu bienestar mientras trabajas. Así podrás prevenir lesiones y sentirte más cómodo y productivo/a durando todo el día.

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¿Qué consecuencias tiene para tu salud trabajar sentado?

Un trabajo sedentario reduce el gasto calórico diario y disminuye la actividad física. Eso genera consecuencias negativas para tu organismo, tanto a corto como a largo plazo:

  • Aumenta la grasa corporal y el perímetro de cintura a consecuencia de la falta de movimiento. Incluso puede ser un precursor de la diabetes, obesidad o enfermedades cardiovasculares.

  • Dolor de espalda y desviación de la columna vertebral, ya que el estrés y las tensiones laborales alteran la postura corporal. Las contracturas y la cefalea también aparecen asociadas.

  • Mala circulación: tener las piernas en la misma posición reduce la circulación sanguínea, lo cual favorece la aparición de varices, la retención de líquidos y la trombosis.

Como sentarse correctamente en la oficina

Para mucha gente es cómodo cruzar las piernas, pero no es una postura muy adecuada. Imagen: Zinkevych D.

Ajusta la silla

El primer paso para sentarse correctamente en el trabajo es asegurarse de que la silla esté bien ajustada. Tus pies tienen que estar apoyados en el suelo de manera que formes un ángulo de 90 grados con tus muslos. Procura mantener la espalda recta, ligeramente apoyada en la silla y los hombros relajados. Invierte si puedes en una silla ergonómica: tu espalda te lo agradecerá.

La pantalla siempre a la altura de los ojos

Si trabajas en ordenador, coloca la parte superior de la pantalla a la altura de los ojos y a una distancia media de 50 cm, así evitarás lesiones en el cuello. Recuerda que cuantas más pulgadas tenga la pantalla mayor tiene que ser la distancia.

Descansa e hidrátate

Es importante hacer pequeñas paradas a lo largo del día para ponerse derecho, estirarse y moverse. Eso ayudará a prevenir la rigidez y mejorar la circulación. Un consejo muy útil es programar una alarma para acordarse de que tienes que beber agua y levantarte cada media hora, o una hora como máximo.

Utiliza un cojín lumbar

Si tu silla no ofrece bastante soporte a la zona lumbar, utiliza un cojín lumbar. Su forma ergonómica reduce la presión a la espalda baja, relaja la musculatura de la zona y proporciona el apoyo ideal para la columna vertebral.

No cruces las piernas

Cruzar las piernas solo fomenta la mala postura y empeora la circulación sanguínea. Mejor deja los pies apoyados en el suelo. Si te resulta incómodo, prueba con un soporte especial para pies.

 

En conclusión, permanecer sentado por largos periodos de tiempo en el trabajo puede tener efectos negativos en tu salud, pero hay soluciones que puedes poner en práctica desde hoy mismo. Saber cómo sentarse correctamente, hacer pequeñas paradas para levantarse, y utilizar un cojín lumbar, si es necesario, son factores que corregirán tu postura y evitarán las temidas molestias y lesiones. ¡Di basta al dolor de espalda!