El calor se acerca y el pulgón lo sabe. A esta pequeña y temida plaga le encanta reproducirse con las altas temperaturas y si no le pones remedio puede arruinar tus plantas y verduras en un abrir y cerrar de ojos. No te dejes vencer por estas diminutas criaturas chupadoras de savia. Afortunadamente, muchos se han enfrentado a ellos antes, y saben cómo tratar el pulgón de las plantas con métodos caseros. 

Te presentaremos cinco modos probados y seguros para combatir esta plaga, sin la necesidad de recurrir a productos químicos agresivos.

Aprende cómo tratar el pulgón de las plantas y mantenerlo a raya

1. Agua y jabón potásico

La solución más sencilla es mezclar agua y jabón potásico en un pulverizador. Es un tipo de jabón que puedes comprar o fabricar tú mismo/a en casa con agua, un lípido como aceite de girasol, y potasa caústica.

Diluye este jabón potásico en proporción de 20ml por litro de agua, y rocía esta solución sobre las plantas afectadas, prestando especial atención a la parte inferior de las hojas donde suelen congregarse los pulgones. El jabón ayudará a deshidratar y eliminar a estos insectos invasores. Puede que tengas que echar alguna pasada adicional.

Jabón potásico: un buen método contra el pulgón de las plantas. Imagen: Dario LoPresti

2. Aceite de neem

El aceite de neem es un poderoso aliado en la lucha contra el pulgón. Este aceite natural se obtiene del árbol de neem y tiene propiedades insecticidas y fungicidas. Diluye tres cucharadas de aceite de neem en agua y rocía esta mezcla sobre las plantas afectadas. El aceite de neem actúa sofocando y repeliendo a los pulgones, impidiendo que se alimenten y se reproduzcan.

3. El poder del ajo

El ajo no solo es un ingrediente culinario aromático y delicioso, ¡también es un excelente repelente de pulgones! Prepara un extracto de ajo casero triturando varios dientes de ajo y mezclándolos con agua. Deja reposar la mezcla durante toda la noche y luego cuélala. Diluye la mezcla en agua y pulverízalo sobre tus plantas. El olor fuerte del ajo actuará como un repelente natural, manteniendo a los pulgones a raya como si fueran vampiros.

¡Qué pena de repollo! Prueba con el extracto de ajo si no quieres ver algo así en tu huerto. Imagen: Flernata.

4. Solución de alcohol

Aunque no lo creas, el alcohol isopropílico es otro remedio casero infalible contra el pulgón. Mezcla partes iguales de alcohol isopropílico y agua en un pulverizador y extiende esta solución sobre las hojas afectadas. El alcohol reseca a los pulgones y ayuda a eliminarlos de manera efectiva. Si eliges esta opción, debes tener cuidado de no rociar demasiado cerca de las flores o en días soleados, ya que podrías dañar las plantas.

5. Plantas repelentes

Aprovecha el poder de algunas plantas repelentes para liberarte de los pulgones. La menta, el romero, la lavanda y la albahaca son solo algunas de las opciones que puedes cultivar cerca de tus plantas afectadas. Estas plantas emiten aromas que ahuyentan a los pulgones y otras plagas. Además, puedes utilizar sus hojas frescas para preparar infusiones que luego puedes rociar sobre tus plantas para potenciar el efecto repelente.
 

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Ya sabes cómo tratar el pulgón de las plantas con estas soluciones caseras y naturales. Además de ser seguras para el medio ambiente, estas alternativas resultan muy económicas y son fáciles de preparar.

Recuerda que la prevención es clave para evitar la destrucción del pulgón. Mantén un cuidado adecuado de tus plantas, asegurándote de proporcionarles un ambiente saludable y equilibrado. Fomenta la diversidad de plantas en tu jardín para atraer insectos beneficiosos, como mariquitas, que se alimentan de los pulgones, o avispas parasitoides, que los usan para poner sus huevos en ellos.

Siempre es importante estar atento a los primeros signos de infestación y tomar medidas rápidas para controlar la plaga. Para ello, inspecciona periódicamente tus plantas en busca de pulgones y aplica sin miedo estos métodos caseros fulminantes.

¡Tu jardín te lo agradecerá!