Tinder tiene, según sus datos oficiales, 530 millones de usuarios, es una de las aplicaciones de citas más populares de todo el mundo y no es de extrañar. El mundo digital ha simplificado nuestra vida, incluidas las relaciones. Atrás quedan esas salidas fuera de casa (a menudo estériles) en busca del amor o de un poco de cariño. Con un solo clic y después de que la IA haya seleccionado los perfiles que nos son compatibles, gran parte del trabajo ya está hecho.
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Pero si estás con el teléfono o la tablet en la mano, a punto de iniciar una conversación con alguien de Tinder, espera un poco. Antes de lanzarte, debes tener en cuenta que hay formas y formas de romper el hielo, algunas con más éxito que otras, es solo cuestión de saber cómo afrontar esas primeras palabras con alguien que no conoces de nada. Y cómo no hacerlo. Estas son las peores formas de empezar una conversación en Tinder.
Empezar una conversación en Tinder no es difícil
Las primeras veces siempre cuesta, especialmente cuando se trata de hablar con alguien que no tenemos delante. No estamos en un bar o en un restaurante y vemos delante a nuestra cita. Solo tenemos algunas fotografías y algunas palabras que nos hacen montarnos nuestra propia película. El ser humano es capaz de imaginar lo imaginable y crear una historia con poco más de lo que está viendo.
Tinder es el mito de la Caverna de Platón en versión aplicación. Estás en una cueva y solo ves una parte del mundo, pero no toda, esas sombras que tienes delante en forma de fotos, son incompletas. Donde ves a un tipo en bicicleta y te imaginas a un deportista nato, hay un hombre que alguna que otra vez coge la bici, pero normalmente prefiere hacer otras cosas. Donde ves a una mujer con aspecto serio en un entorno corriente se esconde una aventurera con un enorme sentido del humor.
Las apariencias engañan, sí, y debes tenerlo presente. Pero aún más engaña una primera impresión equivocada por una torpeza tuya. ¡No hagas nada de esto!
Cuidado con las bromas en Tinder pueden confundir
Las bromas son una forma de romper el hielo, pero cuidado, si no conoces a esa persona y te embarcas con tu peculiar sentido del humor, quizás naufragues antes de salir del puerto. Está bien mostrar un poco de humor, pero deja que la conversación se haya iniciado o de lo contrario, quizás no recibes ni una respuesta, ante unas palabras que nadie más que tú entiende.
La Biblia en verso rara vez funciona en Tinder
Quieres decirle muchas cosas a esa persona, pero tranquilidad, ya tendrás tiempo. No busques contarle tu dura infancia después de un Hola o le sueltes toda tu vida sentimental por capítulos. Tinder es otra realidad, un lugar en el que vas a pasártelo bien y no a contar tus penas o vida, al menos las primeras frases. Borra el chip de querer hablar más de la cuenta, centra tu atención en el presente y disfrutar o conseguirás que tu cita huya.
Tinder quiere un poco de acción
Los monosílabos no son una buena idea. Aunque quieras ir de misterioso o no decir demasiado sobre tu vida, la gente entra en Tinder para ver acción, un chat en el que no se dice nada, no es nada atrayente. Sigue el tono de tu posible pareja, intenta ponerte a su altura, hablando de la misma forma, sin forzar nada de nada. Si no te invita a hablar o te contesta con un poco de gracia, quizás no sea la pareja que estás buscando.
Una de las claves para que la cosa funcione en Tinder, como en cualquier otra cita física o digital, es sobrevivir a la rotura del hielo. Una vez se han intercambiado las primeras frases, si hay un mínimo de química, las cosas fluyen solas. Así que, ¡déjalas fluir!