Has recibido una invitación para uno de los eventos más transcendentales en la vida de una pareja: ¡su boda! Eso significa que ocupas un lugar importante en sus corazones, y desean compartir contigo ese día tan especial. Confían en que sabrás comportarte y sumarás experiencias para hacer de su boda un momento inolvidable.
🐶 ¿Perros en bodas?
Como en toda celebración de etiqueta, existen ciertas pautas que es recomendable seguir para evitar situaciones incómodas y mantener una relación armoniosa con los novios. Porque, en fin: hay veces que la cosa acaba fatal. Y no queremos que sea el caso de la boda a la que te han invitado. Por eso, desde La Tumbona, nuestra sección de verano de ElNacional.cat, te revelamos las nueve cosas que debes evitar a toda costa si no quieres convertirte en el invitado más odiado.
No hagas estas cosas en una boda si no quieres que te odien
1. Vestir de blanco
A menos que sea una boda de temática ibicenca, o te especifiquen que puedes hacerlo, vestir de blanco es un grave error. Solo conseguirás quitarle protagonismo a la novia y ganarte un odio generalizado, mejor elige otro color. ¡Estarás igual de radiante!
2. Traer invitados extras
Los novios pasan meses eligiendo a los invitados. Son horas y horas de trabajo, así que no agregues a última hora a amigos o conocidos sin consultar. Y, si falta poco para el evento, tampoco consultando: solo vas a trasladar más presión y cambios a unos novios que ya bastante nerviosos estarán.
3. Arruinar el baile nupcial
Uno de los momentos más esperados es el baile de los novios. Evita ser el centro de atención durante ese momento y procura que los niños no molesten. ¡Déjalos brillar!
4. Pasarte con las copas y montar numeritos
Está asumido que en las bodas se bebe, incluso que algunos pueden acabar un poco taja. Pero si no sabes beber o se te va la mano, puedes arruinarlo todo. Bajo tu óptica ebria serás super majo/a, pura diversión, el alma de la fiesta. Para el resto de gente, serás el vergonzoso invitado que anda a gatas por el suelo, choca con los camareros, suelta bromas humillantes, o causa algún otro estropicio. Y a los novios no les va a gustar.
5. Iniciar una pelea o discusión
En una boda debe florecer el amor y la alegría, así que deja de lado las tensiones y disfruta del día. No te dejes llevar por malos entendidos, ni dejes escapar viejos rencores familiares o entre amistades. Ya tendrás tiempo de discutir otro día.
6. No confirmar tu asistencia
No olvides confirmar tu asistencia a tiempo para que puedan los novios puedan planificar cualquier cambio con tiempo. Es de muy mala educación no confirmar, parece un desprecio a la pareja.
7. Pedir una ración extra del menú al camarero
El menú de la boda está previamente organizado y contado, no hagas pedidos extra en secreto al camarero para repetir comida o traerás problemas en las cuentas.
8. No regalar nada o llevar algo que no estaba en la lista
Respeta la lista de regalos de los novios, o lo que sea que hayan pedido (si por ejemplo solo pedían dinero porque ya viven juntos y tienen todos los muebles, electrodomésticos, etc.). Los novios, para su boda, piden las cosas que realmente necesitan. Demuestra que los aprecias dándoles eso que necesitan, y no lo que te salga a ti de las narices.
9. Pedir en matrimonio a tu pareja
La boda es el día especial de los novios, no es el mejor momento para hacer una propuesta de matrimonio a tu pareja. Es una falta de respeto para los novios y para tu pareja. Reserva la gran noticia para un momento de más intimidad. O, si quieres hacerlo en público y con mucha gente, ¡al menos que sea en otra ocasión!
Una boda es un momento especial para los novios, y respetar su día y sus deseos los hará sentirse felices y en armonía contigo. Sigue estos consejos y serás recordado como un invitado encantador. ¡Disfruta de la celebración y comparte ese momento idílico con los enamorados!
Y, ya que estamos hablando de odiar o ser odiado, quizá quieras saber también cuáles son las cosas que más odian los camareros, o cómo insultar adecuadamente en catalán (por favor, si vas a usar estos insultos, ¡hazlo después de la boda!)