La primavera y tú, con los cuidados adecuados, habéis logrado esas flores tan bonitas que ahora lucen tus plantas y dan a tu jardín vida y color, o esos frutos que ya empiezan a asomar en tu huerto. Y claro, llega el verano con su “aquí estoy yo” y te preocupa que el sol inclemente del exterior, o los cambios bruscos de temperatura del interior, con el aire acondicionado, puedan dañar tus plantas. Así que veamos algunos cuidados de las plantas en verano para aliviar tus preocupaciones.

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Verás que con un poco de inteligencia y algunos recursos tus plantas podrán sobrevivir a lo peor del calor.

Las claves de los cuidados de las plantas en verano 

¡Cuidado con el exceso de sol!

Las plantas necesitan luz solar, pero no todas necesitan la misma cantidad, y sin duda un exceso puede ser perjudicial, además de que las plantas son sensibles a los rayos solares más intensos. Va a tocar protegerlas.

En un balcón o terraza, se trata de mover las macetas para que las plantas reciben algunas horas menos de luz solar directa, o al menos en los momentos centrales del día.

En un huerto fijo, quizá quieras proteger algún cultivo con algún tipo de malla. Pero en este caso lo importante es que aprendas de un año para el otro y busques los lugares más sombreados del huerto para las plantas que peor llevan el sol.

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El sol de mañana es una cosa; el sol de mediodía, durante la canícula, otra muy distinta. Imagen: JuliaMois

Riego adecuado y en equilibrio

Mantén tus plantas felices y frescas con un riego equilibrado. Aunque estés tentado/a por el calor, olvídate del exceso de agua, puede ser más perjudicial que no regarlas. Sigue estas claves:

  • Adapta la frecuencia de riego según la temperatura, la sequedad del ambiente y el tamaño de las macetas.
  • En interior, el aire acondicionado reseca el ambiente: ajusta la frecuencia de riego.
  • Riega temprano durante la mañana, o durante el atardecer o por la noche, y evita hacerlo en las horas centrales del día, ya que el sol sobre las gotas de agua hará "efecto lupa" y puede quemar las hojas, y el calor excesivo achicharrará las raíces como si las hirviera.
  • No desperdicies el agua sobrante en los platos de las macetas, ¡es un elixir para otras plantas!
  • Para un crecimiento fuerte y resistente, apuesta por riegos profundos y espaciados. Así las raíces se desarrollarán en profundidad y tus plantas serán verdaderas campeonas contra la sequía. Riega sin prisas, que absorba bien, para evitar encharcamientos indeseados. 

Agua sin cloro ni cal

El agua corriente que llega a nuestras casas contiene, en especial en verano, cloro y cal, que la garantizan potable y segura para la población. Por desgracia, son dos elementos que no se llevan bien con las plantas.

Por eso es conveniente que el agua de riego que usas, si es del grifo, la dejes reposar 24 horas para que se evapore el cloro. Y después échale 2-3 gotas de vinagre por litro para neutralizar la cal. ¡Así a las plantas les gustará mucho más! 

Acolcha el suelo

El mulching o acolchado del suelo es una práctica estupenda que protege la tierra de las heladas en invierno, y de la pérdida de humedad en verano.

Consiste en cubrir el suelo con alguna materia orgánica: hojas secas, tallos y podas, cortezas... ese material se va degradando y devolviendo nutrientes al suelo, y además evita la evaporación, por lo que el riego se optimiza.

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El acolchado en macetas mantiene la tierra húmeda sin que esté encharcada. Imagen: Stefania Larisik.

Rutina de limpieza

Las plantas también necesitan su rutina de aseo. Elimina el polvo y la suciedad que se acumulan en las hojas y flores con agua suave pero abundante. También es importante quitar las hojas y flores secas, ya que pueden absorber agua y afectar el crecimiento de la planta. Quítalas y déjalas sobre la misma maceta para que hagan de acolchado.

Elección de macetas y sustrato

Opta por macetas de cerámica u otros materiales transpirables, que permitan un buen drenaje del agua y elige un sustrato ligero y bien aireado como el compost casero.

Prevención de plagas y enfermedades

En verano, las plagas y enfermedades son más comunes. Cuídalas con tratamientos adecuados para combatir parásitos, insectos y hongos. Realiza estos tratamientos en las horas más frescas del día.

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Ahora que conoces estos cuidados de las plantas en verano, tu jardín y tus macetas se mantendrán llenos de vida. ¡Dales a tus plantas el cuidado que se merecen y disfruta de tu jardín o terraza sin agobiarte por el sol!