Hay sobre este planeta animales que parecen sacados de una película de ciencia ficción, y si no nos sorprenden más es porque los damos por sentados. Por ejemplo, el rinoceronte: una masa de carne mamífera pero sin pelo, con piel correosa dispuesta en forma como de armadura de placas, ¡con un inmenso y amenazador cuerno en la nariz! Un animal increíble que, cómo no, se encuentra amenazado por la acción humana.

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Actualmente existen 5 especies de rinoceronte, todas ellas amenazadas, y algunas en peligro crítico de extinción, motivo por el que el 22 de septiembre se celebra, desde hace más de una década, el Día Mundial del Rinoceronte por iniciativa de WWF Sudáfrica. Descubre cuál es el estado actual de conservación de esta especie, y muchas curiosidades interesantes, como que los rinocerontes se comunican a base de estornudos… ¡y heces!

9 curiosidades sobre los rinocerontes que te gustará conocer

1. De los pequeñitos a los descomunales: las 5 especies de rinoceronte y su estado de conservación

Los rinocerontes son criaturas grandes en general, y algunas de las especies llegan a ser descomunales. El más grande de todos es el rinoceronte de la India, que puede llegar a medir más de 3,5 metros de largo, un altura de casi dos metros, y un peso de más de 2 toneladas, y que actualmente se considera una especie vulnerable.

Le siguen el rinoceronte blanco africano, el más conocido y extendido, y el menos amenazado en estos momentos, al revés que su primo el rinoceronte negro que está en peligro crítico de extinción junto con sus otros primos indios más pequeños: el rinoceronte de Java y el de Sumatra, de los que apenas quedan vivos unas decenas de ejemplares en libertad.

2. El rinoceronte blanco no es blanco, y el rinoceronte negro no es negro

Este es uno de esos casos de errores graciosos de traducción: en Sudáfrica se les designaba con la palabra “wyd” en afrikáans, que significa “ancho”, porque tienen el morro cuadrado, y a los naturalistas ingleses eso les sonó como “white”, así que lo llamaron rinoceronte blanco, aunque fuera claramente gris. Por contraposición, al otro rinoceronte africano, que tiene el morro puntiagudo, le llamaron negro, aunque tampoco fuera negro sino que fuera igual de gris que el blanco. Un buen lío de colores.

Dos rinocerontes… ¿blancos? ¿negros? ¿grises? Imagen: Nodar77.

3. Les gusta el barro más que a los cerdos

Los mamíferos sin pelo tienen que protegerse del sol, el calor y los parásitos, y a menudo lo hacen revolcándose en el barro. Los rinocerontes no son excepción, les encanta pegarse tremendos revolcones en el lodo.

4. Se comunican entre ellos mediante estornudos y heces

Los rinocerontes tienen un sorprendente rango de vocalizacionesgrititos y sonidos, pero sin duda los más curiosos son los estornudos. También dejan montículos de heces y orina para marcar sus territorios. En este video podrás verlos comunicarse de mil formas distintas (y chapotear en el barro con gusto):

5. Sus cuernos están hechos de lo mismo que tus uñas, pero son mucho más valiosos

Queratina pura: la misma proteína que forma nuestras uñas y pelo, es la que hace crecer los cuernos de los rinocerontes. Pese a ser algo tan vulgar, en oriente el cuerno de rinoceronte se considera maravilloso para la medicina tradicional china, y por eso la caza furtiva ha diezmado sus números: todo para robarles el cuerno.

6. Se llevan muy bien con los pájaros

Los picabueyes y otros pájaros suelen posarse en los lomos de los rinocerontes, lo que a ellos les encanta: para las aves es un restaurante móvil y seguro lleno de parásitos que devorar, y al rinoceronte le limpian y rascan la espalda. ¡Un win-win!

Rinoceronte con dos pajarillos comensales. Imagen: Wirestock.

7. Tienen embarazos larguísimos

¿Te parece que los 9 meses de embarazo humano son muy pesados? Pues no quisiéramos ser rinocerontes, porque sus embarazos duran entre 15 y 16 meses, ¡y las crías pesan ya al nacer en torno a los 50 kg!

8. Son muy longevos

Los rinocerontes pueden vivir más de 40 años, y en cautiverio los buenos cuidados veterinarios los llevan a sobrepasar los 50 años de vida.

9. Apenas tienen depredadores

¿Quién se enfrentaría a un rinoceronte? Nadie en su sano juicio: los depredadores que comparten territorio con los rinocerontes, como mucho, atacan a alguna cría desprevenida que tengan a mano, pero en general dejan en paz a estas criaturas que pueden aplastarles o ensartarles en un momento, y con una piel tan dura que es imposible morder.

Los únicos que realmente son una amenaza para los rinocerontes somos los humanos, porque con los cobardes fusiles cualquier criatura está indefensa.