¿Tras leer nuestro artículo sobre los indicios de infidelidad sigues sospechando que tu pareja es infiel? ¡Mírale las manos! Sin entrar en el mundo de la quiromancia, hay un modo de averiguar si una persona tiene tendencia a cometer infidelidades con solo mirarle las manos. Lo ha revelado un estudio publicado en la revista Biology Letters. En dicha investigación, se analizaron las manos de varias personas que, estando en pareja, tenían tendencias promiscuas y descubrieron una característica en la longitud de dos de sus dedos.
Quédate para conocer los detalles del estudio y ve preparando una estrategia para mirarle las manos a tu pareja.
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Mírale las manos a tu pareja y descubre si es promiscua o fiel
Los investigadores Robin Dunbar (Universidad de Oxford) y John Manning (Universidad de Northumbria), demostraron en su estudio «Stay or Stray? Evidence for Alternative Mating Strategy Phenotypes in Both Men and Women» que la infidelidad es demostrable según la forma y disposición de los dedos índice y anular. Y su estudio desvela a hombres infieles y mujeres infieles por igual. Antes de que vayas corriendo a mirarle los dedos de la mano a tu pareja, te revelamos los puntos fuertes de este estudio:
Dos dedos clave
Dunbar y Manning encuestaron a 575 personas norteamericanas y británicas sobre sus preferencias y deseos hacia el sexo sin compromiso. Los resultados revelaron que las personas con mayor tendencia infiel tenían el dedo anular más largo con respecto al índice.
Testosterona alta
El estudio encontró una relación entre las personas que tenían el dedo anular más largo que el índice: su nivel de testosterona era también más alto. Apuntaron que estos niveles podrían venir ya determinados en el útero materno, con lo que la promiscuidad sexual podría estar presente antes de nacer.
Igualdad de sexos
Anteriormente, a este estudio, se han realizado otros estudios que relacionaban un dedo anular largo con un alto grado de masculinidad, pero Dunbar y Manning descubrieron en su estudio que, aunque había más tendencia promiscua prenatal en hombres, existía un gran número de mujeres con el dedo anular más largo que el índice. Esto les permitió afirmar que el sexo no era determinante en la infidelidad.
Es cierto que en este estudio sobre la relación entre la longitud de los dedos y la fidelidad nos aporta una nueva perspectiva sobre lo complejo que es el comportamiento humano. Aunque el profesor Dunbar recuerda que las influencias en nuestras acciones son diversas y multifacéticas y hay factores como el entorno y las experiencias de vida que también juegan un papel fundamental en la forma en que elegimos interactuar en nuestras relaciones.
No decimos, pues, que determines exclusivamente la infidelidad de tu pareja por la longitud de los dedos de su mano. Más bien, te invitamos a evaluar la variedad de factores internos y externos que puedan estar influyendo en vuestra relación.