En el mundo empresarial, la cohesión de equipo se convierte en un ingrediente vital para impulsar la productividad y avivar la motivación laboral. Esa cohesión se consigue con el propio trabajo de forma natural, pero pueden surgir problemas, y puedes dar empujoncitos en la dirección adecuada, y en esto las dinámicas de trabajo en equipo desempeñan un papel fundamental.

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Estas actividades, meticulosamente diseñadas y estructuradas, tienen el poder de fortalecer los lazos entre los colaboradores y potenciar la colaboración en el entorno laboral. Desde sus inicios en la década de los 30, se han convertido en un recurso muy efectivo para mantener la dirección y el enfoque de los equipos durante la realización de proyectos.

Las principales ventajas de las dinámicas de trabajo en equipo son:

  • Coordinación interna.

  • Claridad en los roles de cada miembro del equipo.

  • Desarrollo de competencias y talentos individuales. 

  • Superación de obstáculos.

  • Reducción del estrés.

Así que, como ves, te interesa ponerlas en marcha. Aquí tienes cinco ejemplos de dinámicas de trabajo en equipo que puedes implementar para fortalecer la cohesión de tu grupo de trabajo: 

Cohesiona y mejora el rendimiento general con estas dinámicas de trabajo en equipo

1. Romper el hielo

Un inicio refrescante donde los desconocidos se encuentran y se descubren. Cada participante tendrá la oportunidad de presentarse y compartir un destello de sus intereses. Luego, formarán grupos pequeños de 2 o 3 personas para explorarse más a fondo a través de conversaciones genuinas y auténticas. Esta dinámica es perfecta para integrar equipos en los que los colaboradores son nuevos

Romper el hielo es una de las dinámicas de trabajo en equipo básicas cuando hay muchos nuevos entre los integrantes. Imagen: Gpointstudio.

2. Globo aerostático

La toma de decisiones se convierte en una aventura extrema. Se plantea un escenario en el que el equipo se encuentra atrapado en un globo aerostático y, en un acto heroico, uno de los integrantes deberá “descender” voluntariamente para evitar un desastre inminente. El tiempo apremia, las opiniones se entrecruzan y el equipo deberá debatir y decidir antes de que el reloj marque su último segundo.

Esta dinámica también es muy útil para conocer personalidades del grupo, y comprobar quiénes son las personas más participativas y llevan la voz cantante, quienes se retraen, quiénes se aferran a su opinión, son capaces de adaptarla, o cambian de idea cada dos por tres, quienes pactan para salvar la vida y quiénes piensan de forma más global, etc.

3. Técnica 6-3-5

Esta actividad despierta la creatividad y fomenta la colaboración. Consiste en seleccionar a seis miembros del equipo y otórgales cinco minutos para plasmar en una hoja tres posibles soluciones a un desafío empresarial. Luego, la hoja se pasa al siguiente integrante y se repite la dinámica hasta que cada trabajador tenga una hoja con 18 ideas distintas. Es una de las dinámicas de trabajo en equipo ideal para generar una gran cantidad de ideas en poco tiempo.

4. El cliente imprevisible

Esta dinámica, basada en el juego de roles, tiene como objetivo fomentar la empatía y la capacidad de persuasión de los vendedores. Un integrante del equipo asume el papel de un cliente imprevisible, planteando dudas y quejas. Los vendedores deberán solucionar estas inquietudes, prestando atención a las emociones del cliente. Si el equipo no responde adecuadamente, perderán al cliente, quien deberá ajustar sus emociones y gestos en función de las respuestas de los vendedores.

5. La espada del tiempo

Una dinámica divertida que pondrá a prueba la capacidad del equipo para organizarse, resolver conflictos de liderazgo y superar obstáculos en los procesos de negociación es la de la espada del tiempo. Se trata de dividir al equipo en dos grupos y se les asigna un desafío con cierta complejidad, como armar un rompecabezas o construir algo utilizando materiales de oficina. La actividad revelará las dificultades que enfrenta el grupo y juntos deberán resolver los problemas para alcanzar los objetivos propuestos.

Estas dinámicas de trabajo en equipo son solo algunos ejemplos entre tantas otras opciones. Es recomendable adaptarlas a las necesidades y características específicas de tu equipo. Con este tipo de actividades ganarás conocimiento de las habilidades y flaquezas de cada miembro, y conseguirás cohesión, colaboración y motivación, lo que inevitablemente se traduce en mejor ambiente laboral y un aumento del rendimiento. ¡Un éxito!