Caminar es una de las formas más accesibles y efectivas de mantenernos activos y mejorar nuestra salud. No requiere equipamiento especial ni membresías costosas; simplemente, un par de zapatos cómodos y las ganas para movernos. Sin embargo, ¿sabías que el momento del día en que decides caminar puede influir significativamente en la cantidad de calorías que quemas y en los beneficios generales para tu salud? Diversos estudios han demostrado que ajustar el horario de nuestras caminatas puede potenciar la pérdida de peso, mejorar la salud metabólica y aumentar nuestra energía diaria.

Entre las 6 y 8 de la mañana

Realizar caminatas en las primeras horas del día puede tener efectos positivos en el metabolismo y en la regulación del apetito. Según un artículo de The Times, el ejercicio matutino es ideal para quemar grasa abdominal y promover elecciones alimenticias más saludables, contribuyendo a la pérdida de peso y mejorando las funciones cognitivas. ​

Entre 20 y 30 minutos después de desayunar y almorzar

Caminar después de las comidas, específicamente entre 20 y 30 minutos después de desayunar o almorzar, puede mejorar la digestión y aumentar la quema de calorías. Un artículo de Verywell Health señala que caminar después de comer puede acelerar el movimiento de los alimentos a través del sistema digestivo, reduciendo molestias gastrointestinales como hinchazón y gases. Además, esta práctica puede ayudar a regular los niveles de azúcar en sangre, lo que es beneficioso para el control del peso y la prevención de enfermedades metabólicas.​

Entre las 4 y 7 de la tarde

Realizar caminatas en la tarde, entre las 4 y 7 de la tarde, puede ser beneficioso debido a la variación natural del gasto energético a lo largo del día. Un estudio publicado en Current Biology indica que el cuerpo humano quema hasta un 10% más de calorías en reposo al final de la tarde en comparación con las primeras horas de la mañana, debido a fluctuaciones en la tasa metabólica basal influenciadas por el ritmo circadiano. Por lo tanto, programar caminatas durante la tarde podría aprovechar este aumento natural en el gasto calórico.​

Entre 1 y 2 horas después de cenar

Caminar después de la cena, esperando entre 1 y 2 horas para permitir una digestión inicial, puede contribuir a la quema de calorías y mejorar la salud metabólica. Según Real Simple, una caminata de 15 minutos después de la cena puede ayudar a regular los niveles de azúcar en sangre, mejorar la digestión y aumentar el metabolismo. Además, esta práctica puede mejorar el estado de ánimo y facilitar un mejor descanso nocturno.​

La elección del momento para caminar puede influir en la eficacia de la quema de calorías y en otros beneficios para la salud. Caminar en la mañana puede mejorar nuestro estado de ánimo para afrontar el día, mientras que hacerlo después de las comidas puede mejorar la digestión y el control glucémico. Las caminatas vespertinas aprovechan las variaciones naturales del metabolismo, y caminar después de la cena puede contribuir a una mejor salud metabólica y calidad del sueño. Independientemente del horario elegido, mantener una rutina constante de caminatas es clave para obtener beneficios sostenidos en la salud y el bienestar.