Puede parecer extraño, pero a los pies del Cadí hay un mágico laberinto lleno de misteriosas piedras con caras esculpidas. Pensarás que estás soñando, pero es tal y como lees: un espacio misterioso creado por un artista que se ha dedicado a construir este entorno durante años. ¿Sabes de qué lugar te estamos hablando? Se trata de Rocaviva, un parque laberíntico al aire libre, lleno de piedras con rostro que te miran cuando avanzas por el camino. Una visita obligada en Catalunya para aquellos más curiosos.
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Parque de y laberinto de Rocaviva
Rocaviva parece un lugar sacado de un sueño, y quizá lo sea: es el sueño del artista Climent Olm, escultor, que durante más de un cuarto de siglo se ha dedicó a tallar símbolos, caras y personajes en las rocas grandes y pequeñas de su terreno familiar, ubicado entre el Alt Urgell y la Baixa Cerdanya, en dos fincas vecinas a la salida del pueblo de Músser.
Imagen: Climent Olm.
El parque como tal ocupa unas 10 hectáreas con unas vistas espectaculares a la sierra del Cadí, pero es lo cercano lo que te va a dejar sin aliento. Entre los árboles, bajo la espesura, detrás de un arbusto, mirando al horizonte, por todas partes las rocas observan y casi respiran, cerca de 600 esculturas que convierten la visita en algo único, que no puedes encontrar ni en Catalunya ni en ninguna otra parte. Todo aquel que visita el parque queda impresionadísimo (comprueba su puntuación en Tripadvisor), y eso que es casi un milagro que se pueda seguir visitando.
Imagen: Climent Olm.
Mira lo que te estás perdiendo si no vas a visitarlo:
La apertura, el cierre, el vandalismo y la reapertura del parque
Conocido como el Museo al Aire Libre y como Laberinto Mágico, el parque de Rocaviva empezó a esculpirse en 1986, y el lento proceso de creación culminó en la apertura al público en 2012. El artista hacía entonces las visitas guiadas en el parque, (donde él mismo vivía, en una cabaña dentro del bosque) pero diversos conflictos familiares por la propiedad de la finca acabaron con Olm expulsado de su casa, el parque abandonado, y las esculturas a merced de los vándalos, que destrozaron algunas.
Durante los siguientes años hubo mucho estira y afloja entre las distintas autoridades, y finalmente en 2018 el parque volvió a abrirse, si bien solo una parte (la que pertenece 100% al artista Climent Olm).
Cómo llegar al parque y cómo realizar una visita única
Actualmente, para visitar el parque de Rocaviva es necesario concertar la visita con los responsables de la Associació Cultural Rocaviva, en el correo y teléfono que indican en su blog. Hay que llevar un buen calzado, agua, y estar preparado para caminar un buen rato por la montaña, acompañados por alguna de las guías de las que tan bien hablan todos los usuarios que han pasado por el parque recientemente.
Para llegar, tienes que dejar el coche en el pueblo de Músser, en unos aparcamientos habilitados donde comienza el camino, y luego andar por esa pista, un pintoresco camino rural, durante unos 20 minutos hasta llegar a la entrada del laberinto mágico.
Y una vez llegues… ya solo es cuestión de caminar en esa espesura mágica, e ir encontrando las miradas y la misteriosa presencia de los seres rocosos creados por Climent Olm, acompañado de las explicaciones de las guías, en una de las excursiones más místicas y especiales que se pueden hacer en Catalunya.