‘A través de mi ventana’ fue uno de los éxitos que arrasaron en Netflix el año pasado. La adaptación de la novela de Ariana Godoy sorprendió a críticos y usuarios, colocándose como una de las películas de habla no inglesa más vista de la plataforma. El año pasado, Netflix se atrevió a rodar la segunda parte de la secuela, ‘A través del mar’, en la que nos transporta a varias localizaciones de ensueño en la Costa Brava. En esta segunda parte, Raquel y Ares (Clara Galle y Julio Peña) se reencuentran después de empezar su relación a distancia en el fin de semana mágico de San Juan.

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La Casa de los Hidalgo de Begur

En el film, la familia de Ares tiene una casa en la Costa Brava, y menuda casa. Situada en uno de los pueblos más bonitos de la costa gerundense, Begur.  Las vistas del entorno que ofrece esta mansión son simplemente espectaculares. No te pierdas las vistas aéreas que nos muestran en la película también, una manera de ver la naturaleza desde otra perspectiva.

Ares y Raquel también nos muestran la Cala Sa Tuna, un bello enclave a solo 5 km de Begur en el que podrás admirar el maravilloso entorno, sus tradicionales casas blancas de pescadores y la playa, una de las más concurridas en los meses de verano.

Como es habitual en Catalunya, la fiesta de la noche de San Juan transcurre en una de las playas de la Costa Brava. En la película no solo podemos apreciar la belleza de la Cala Sa Tuna, sino también de la próxima Cala de s’Eixugador o la Platja d’Aiguablava, otra de las playas más visitadas de la Costa Brava.

Un Viaje a Través del Mar

Y nunca mejor dicho, el film hace honor a su nombre trasladándonos al Mar Mediterráneo. Varias de las escenas que podremos ver se rodaron encima de un bote, entre los puertos de Palamós y el Estartit. 

En este bote, Raquel y Ares nos llevarán de ruta por la pequeña Cala dels Canyers, una pequeña playa de arena gruesa y guijarros a la que solo se puede llegar por mar o andando desde la playa de Castell. Si eres buen observador verás que la Roca Foradada del Parque natural del Montgrí o la Punta de Milá también aparecen en estas escenas náuticas.

La última parada en ‘A través del Mar’

Para finalizar, el último emplazamiento catalán que aparece en la película es el mismo que aparece en la primera parte de la secuela. Barcelona, que es el principal escenario de la primera parte, aparece con mucha menos presencia en esta segunda entrega.

Clara Galle estudia en la Universidad de Barcelona, lugar emblemático de la Ciudad Condal en el que podremos observar la fachada, su patio y las escaleras interiores de este histórico edificio. En la película también se vuelve a capturar las escenas de la Plaça dels Àngels, lugar de encuentro desde hace muchos años de patinadores y skaters en frente del MACBA.