La amapola es una planta que, por su característica flor roja, llama la atención allí donde aparece. ¿Quién no se ha quedado maravillado por la rojez de un campo de amapolas o, como diríamo sen Lleida, un campo de frares? Si eres de Manresa seguramente hablarías de pipiripips, mientras que en el Vallès utilizarían badabadocs. Y es que hay decenas de formas de llamar a la amapola en catalán, dependiendo de la zona dónde vivas. ¿Sabes como le dicen en tu territorio? En La Gandula d'ElNacional.cat te traemos una recopilación de las principales maneras de decir amapola que seguro que te sorprenderán: ¡hay de bien curiosas!

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Rosella es el nombre general en catalán de esta planta de flores rojas, que crece en zonas sembradas, aunque también en los márgenes de las carreteras. El término tiene un sentido diminutivo, 'pequeña rosa', y se ha ramificado en varias variaciones fonéticas, que han dado origen a nuevas formas de llamarla. Es el caso de roella, por la pérdida de la [z] a causa de la disimilación con la vibrante; rovella, por inserción de una labial [b] o [v] o roguella, por inserción de una [g] antihiática, de la misma manera que pasa con 'duges' para decir 'dues', según explica el Atles Lingüístic del Domini Català (ALDC).

Existen también las variantes ronsella y rodella, así como otras vinculadas a palabras que se pueden asociar a la flor. En este sentido, hay que destacar que hay nombres para decir amapola relacionados con la similitud de color de la flor con la cresta de un gallo. Gall, gallaret, gallgalleret, gallgallinot.. son otras palabras que se utilizan en Catalunya para referirnos a esta flor. Precisamente este último, gallgallinot, está influido por un juego infantil en que los niños cogen una amapola y preguntan si es 'gall o gallina'. Acto seguido, la aplastan y gall significa que es rojo, mientras que gallina es blanco. Así, esta vinculación con el juego y el gallo ha hecho derivar otras formas de decirle como quiquiriquic, quequerequec, o las variantes pipirip, peperepep o puput, todas ellas de origen onomatopéyico y basadas en el canto del gallo.

El juego infantil tiene otras versiones donde no se pregunta si es 'gallo o gallina', sino si es 'frare o monja', hecho que ha dado origen a utilizar frare o flari para referirse a una amapola. También palabras como caputxí, capellà o monja. Según explica el ALDC, este también podría ser de origen de badabadoc.

Si os parecen muchas, tenéis que saber que todavía hay más formas de decir amapola en catalán y, para entender su origen, hay que fijarnos en el nombre latino papaver rhoeas, de donde surge papàriu. Papaver, cruzado con muchos arábigos como 'habb' (grande), ha dado pie a palabras como ababol o babol, modificado en algunos casos como bamberol. La influencia del occitano, el francés o el castellano también ha desencadenado otros como pavot, roïll o coquelicó.

¿Cómo se dice amapola en cada zona de los Països Catalans?

De manera general, el Atlas Lingüístic del Domini Català (PALDC) recoge en un mapa cómo se dice en cada zona de habla catalana amapola. Así, encontramos que en la Franja de Ponent se utiliza ababol de manera general, mientras que en Ponent se usa roella. Una palabra que también se extiende hasta el Delta del Ebro.

De manera excepcional, en algunas zonas del Pirineo se utiliza quiquiriquic, término que también se utiliza en el Empordà. En Santa Coloma de Queralt la amapola se convierte rovella, igual que en la parte oeste de Mallorca. Con respecto al resto de la isla el término más habitual es roella, mientras que en Menorca se utiliza el general, rosella. En Eivissa, también se utiliza el normativo, aunque en una gran parte de la isla se dice amapola, igual que en castellano. En el País Valencià también apuestan por rosella y en la Catalunya Nord, en cambio, coquelicó gana importancia.


Más sinónimos de amapola en Catalunya: gallaret, quecquerequec o paparola 

Si bien estas son las palabras de uso habitual en cada territorio, el Diccionario catalán-valenciano-balear (DCVB) recoge muchas más variantes y, en muchos casos, también indica en qué zona se utilizan:

  • Babol: en la Ribagorça, Vallès, València
  • Badabadoc: en el Vallès
  • Gallaret o galleret: en Conflent, Olot, Ripollès, Empordà, Girona
  • Lloca: en València
  • Paramà (en plural, paramans): en la Garrotxa
  • Pipiripip i piperepip - en el Pla de Bages
  • Quiquiriquic
  • Badabadocs: en Sabadell, Castellar del Vallès y Sant Quirze del Vallès
  • Capellà
  • Caputxí: en Balaguer
  • Gallet: en Mallorca
  • Gallgallaret: en  Ribesaltes, Besalú, Blancafort
  • Monja: al Priorat
  • Quecquerequec: a la Conca de Tremp, Cardona, Vendrell, Camp de Tarragona
  • Vermelló: en el Rosselló
  • Ababol: en València, Fraga
  • Paparola: en Terrassa
  • Peperepep : en la Conca de Tremp, Sta. Coloma de Queralt
  • Quicaracoc: en Calella
  • Roella: en el Alt Urgell, Mallorca, Noguera, Palafrugell, Tàrrega, Vall Fosca
  • Frare: en Lleida, Maella
  • Rovella

Estas, sin embargo, no son las únicas formas existentes en Catalunya para decir amapola y en el portal Rodamots todavía recogen algunas más:

  • Gall: en la Anoia
  • Puput: en Castellserà, Malgrat, Noguera, Sallent, Urgell
  • Monja: en el Priorat
  • Pupurupup: en Agramunt.
  • Ruella: en Amposta, Camp de Tarragona, Conflent, Empordà, Mequinensa, Rosselló, Solsona, Tortosa
  • Quec-querequec: en la Bisbal del Penedès
  • Quequerequec: en Barcelona, Cardona, el Vendrell
  • Quic-querecoc: en el Maresme
  • Quic-quiriquic: en Barcelona

El Termcat, en su buscador del conjunto de fichas terminológicas, también incluye las variantes ganfanó, republicans, senyora, abacol, ruzelo, ronsella, roguella, màpola, babebadoc, cacaraquec, cararequec, cocolicó, coquerecoc, curacallo, gallerós, gallitos, kikerekik, pinipip, pipirip, papaiu papàriu, si bien estas no aparecen en ningún otro sitio.

¿Y tú, cómo le dices a la amapola en catalán?