El paisaje catalán cuenta con una infinidad de pozas y piscinas naturales. Diversas de ellas están cerca de la capital catalana y otros a un rato en coche. Sea como sea, Catalunya dispone de múltiples opciones para refrescarse este verano y disfrutar de unos paisajes espectaculares.
⛰️ La ruta de senderismo catalana en la que pasarás por dentro de una roca, cruzarás puentes y verás cascadas
🌲Una de las torres más enigmáticas de Europa está en Catalunya camuflada entre la naturaleza
Salt de Ratera (Pallars Sobirà)
Situada dentro del Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, encontramos esta cascada formada por el agua del estanque de Ratera, un valle colgado de origen glacial, suspendido sobre el valle principal que ocupa el estanque de Sant Maurici y donde el agua se precipita a través de un primer gran salto y después en múltiples saltos de agua hasta llegar al estanque.
Pozas de Sadernes (la Garrotxa)
Una de las rutas más bonitas y completas que se pueden hacer en plena naturaleza por Girona es la de Sadernes en el Gorg Blau de Sant Aniol d'Agulla y al Salt del Brull. Una excursión muy conocida en la zona y que transcurre siguiendo por la Riera de Sant Aniol, atravesando puentes colgantes, piedras y bosque. Una ruta para toda la familia, que podemos culminar disfrutando con un baño en las transparentes aguas de sus pozas.
Gorg del Molí dels Murris (la Garrotxa)
El Gorg del Molí dels Murris es uno de los mejores paisajes de la Garrotxa. Una poza de agua cristalina que se encuentra rodeada de árboles y plantas de color verde que conforman una zona de baño alucinante. Para llegar, tenéis que tomar el camino que une les Planes d'Hostoles con Cogolls, dirección Olot.
Sauth deth Pish (Vall d'Aran)
Es el salto de agua más emblemático de la Vall d'Aran. Dos chorros de agua (de unos 20 metros y 5 metros respectivamente) forman la espectacular cascada, que proviene mayoritariamente del lago de Long de Liat, un poco más en el norte. De primavera a otoño es el mejor momento para acercarse a ver este paisaje, ya que en invierno es muy posible que la carretera esté llena de nieve y sea de más difícil llegar. Las aguas llegan a lo largo de un curso cárstico que acaba saliendo a la superficie en la fuente de la Era Pila, en el barranco Siesso.
Balsas del Borró (la Garrotxa)
Las cuatro balsas que ofrece el río son un lugar fantástico donde pasar el verano al alta Garrotxa. Para llegar a las más bajas, se accede desde el municipio de Sales, siguiendo las indicaciones por la carretera. Para el resto, hay que planificar la excursión.
Pozas de las Escaules (Alto Empordà)
Los torrentes de la Caula y de Fontanilles conforman unas pozas de agua donde, hasta hace poco, los vecinos se podían bañar prácticamente todo el año. Desgraciadamente por culpa de un desprendimiento de roca, el baño está prohibido actualmente. Aún y así, pasear por la zona y continuar la ruta hacia la ermita, los saltos de agua o las cinchas es una buena opción para disfrutar del paisaje.
Gorg dels Banyuts (Ripollès)
Situado en el arroyo de Garfull, es uno de los parajes relacionados con la leyenda del Conde Arnau, donde se dice que los demonios en forma de machos cabríos (una especie de cabra) o de gatos, según otras versiones, ahogaron al Conde Arnau y lo llevaron hacia el infierno.
La leyenda también explica que en esta poza cada noche sale el Conde Arnau con su caballo de llamas para pasear por estas montañas.