Llega el invierno y eso significa hacer el cambio de armario para sacar toda la ropa que nos tiene que ayudar a combatir el frío. Abrigos, guantes, gorras de lana y bufandas son los grandes protagonistas de estos meses, en los que la ropa térmica es una gran aliada. Pero seguro que, con el paso de los años, has ido acumulando ropa y ropa que ya no utilizas. ¿Qué se puede hacer con las bufandas viejas? A continuación te traemos 5 maneras de transformarlas en auténticas maravillas: ¡no las tires nunca más!

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¿Qué se puede hacer con las bufandas viejas? Formas sorprendentes para transformarlas

¿Tienes una bolsa llena de bufandas viejas o rotas y piensas en tirarlas? ¡No lo hagas! Su composición de fibras sintéticas o los tintes que han usado para su diseño son una bomba para el medio ambiente. Recuerda que si no las reciclas o le das una segunda vida, terminarán contaminando los océanos. La producción textil es responsable de aproximadamente el 20 % de la contaminación mundial de agua potable. Y eso ocurre mucho antes de tirarlas, porque los microplásticos de los textiles sintéticos se liberan en los primeros lavados. Las de lana merina y las de seda contaminan menos, pero el gasto de transporte y producción también cuenta. ¡Actúa! Aquí tienes 5 ideas para reutilizar tus bufandas viejas.

Las bufandas han cambiado mucho a lo largo de la historia. De ser simples "sudarium" en la Roma antigua, destinadas a secar el sudor en verano, han pasado a ser un complemento con mucho estilo. Un cambio épico, ¿no crees? Pero, ¿por qué no seguir este viaje de transformación? Haz un pacto con el planeta y convierte esas bufandas que ya no usas en algo genial. ¡Estas ideas son irresistibles!

1. Camino de mesa

Brinda elegancia a tu mesa de comedor con un camino de mesa de lo más original. Puedes utilizar una o varias bufandas y coserlas hasta conseguir el estilo que encaja con tu salón.

2. Manta de picnic

Selecciona todas las bufandas y fabrícate una manta para tus días al aire libre. Una forma ideal de aprovecharlas con una función superpráctica. Aportará color y comodidad a tus momentos al sol y meriendas en la naturaleza.

3. Funda de cojín sin coser

¿No tienes tiempo para coser? ¡No te preocupes! Con una bufanda cuadrada (tipo fular) puedes hacer una funda para cojín sin necesidad de costuras. Solo anuda las esquinas o dóblala hacia atrás para cubrir tu cojín y dale alegría a tu sofá.

4. Bolso

Si te encantan los accesorios únicos,  convierte esa bufanda colorida que ya no te pones en un bolso original. Puedes unir los extremos y añadirle asas para crear tu propio bolso personalizado.  Fíjate en este vídeo el paso a paso:

5. Delantal

Haz con una bufanda (tipo fular) un útil delantal sin complicarte la vida. Es muy fácil de hacer y no necesitas muchos materiales. Con solo dos fulares y unos simples pasos, tendrás un delantal listo para la cocina en un abrir y cerrar de ojos.

Con estas ideas liberas espacio en tu armario y creas cosas nuevas y prácticas de bufandas viejas que ya no ibas a ponerte. Si al reciclar tus bufandas te das cuenta de que necesitas reponer algunas para combinar con tus conjuntos o abrigarte, elige las opciones sostenibles. Hay muchas plataformas de segunda mano que tienen bufandas en muy buen estado y si quieres comprar o regalar alguna, opta por las bufandas de lana virgen o de fibras recicladas que están fabricadas de forma consciente y sostenible.

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