Ávila se encuentra a unos 100 km al oeste de Madrid y es una pequeña ciudad con mucha historia que merece la pena visitar si, por ejemplo, vas a pasar unos días en Madrid. Mundialmente famosa por sus murallas, Ávila tiene también algunas de las mejores iglesias románicas y góticas de España. Y por si no fuera suficiente con lo ya expuesto, su Casco Antiguo, encerrado por la muralla, y sus iglesias extramuros son reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
La Muralla de Ávila y los Cuatro Postes
La Muralla de Ávila es una de las fortificaciones medievales mejor conservadas de Europa. El rey Alfonso VI mandó construir esta muralla defensiva tras la conquista de Ávila en el siglo XI a los musulmanes. El tramo de 2,5 km de la impresionante muralla de piedra encierra el casco histórico de la ciudad. Hay alrededor de 88 torres defensivas semicirculares a lo largo de la muralla. La altura media de este muro es de 12 metros con un espesor medio de 3 metros y se puede recorrer a pie. En su construcción intervinieron tanto artistas cristianos como mudéjares.
Los Cuatro Postes es una de las principales atracciones de Ávila. Este monumento religioso del siglo XVI tiene forma de cuatro columnas dóricas con dosel y una cruz de granito se encuentra en medio de los postes. Los Cuatro Postes se encuentra a un kilómetro y medio fuera de la muralla, al otro lado del río Adaja. Desde allí ofrece una vista impresionante de la muralla de la ciudad, especialmente por la noche, cuando la gran extensión de la muralla de la ciudad está completamente iluminada. Además, es un gran lugar para ver la puesta de sol.
La Catedral de Ávila y la Plaza del Mercado Chico
La Catedral de Ávila es una de las catedrales góticas más antiguas de España y fue construida en el siglo XII. Está dedicada a San Salvador y su ábside de esta catedral es uno de los torreones de la muralla de la ciudad. Esto le da a la catedral una forma de fortaleza. La arquitectura de la catedral de Ávila tiene influencias francesas y cuenta con un parecido sorprendente con la Basílica de Saint-Denis, considerada la primera iglesia construida con arquitectura gótica propiamente dicha. Dentro de la catedral, encontrarás una mezcla ecléctica de estilos románico y gótico. Hay algunas vidrieras preciosas. El precio de la entrada a la catedral es de 6 euros por adulto.

La Plaza del Mercado Chico, también conocida como la Plaza Mayor, es una plaza de mercado en el corazón del Casco Antiguo de Ávila. Tres de los lados de esta plaza medieval tienen edificios porticados. Tiene muchos cafés y restaurantes, un buen lugar para pararse y disfrutar de un buen refrigerio.
El Monasterio de Santo Tomás y el Convento de Santa Teresa
El Real Monasterio de Santo Tomás se encuentra fuera de la muralla de la ciudad. Los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, encargaron la construcción de este monasterio en el siglo XV para conmemorar a Santo Tomás de Aquino, un fraile dominico. El monasterio cuenta con tres conjuntos diferentes de claustros: Claustro de las Novicias, Claustro del Silencio y Claustro de los Reyes. Aquí fue enterrado el príncipe don Juan, hijo único de los Reyes Católicos.
Construido en la década de 1600, el Convento de Santa Teresa celebra la vida de famosa santa, patrona de Ávila. Situado cerca de la Puerta de Santa Teresa en la muralla de la ciudad, esta iglesia se encuentra en el lugar donde nació Teresa. La cripta subterránea del convento alberga el museo de Santa Teresa. Además dentro de la iglesia se pueden visitar las reliquias de la santa, que incluyen una de sus sandalias y un dedo de su mano derecha.
Por último, no dejes de alimentarte aprovechando la especialidad de Ávila: el chuletón. La ciudad también es famosa por las judías del Barco, un tipo de alubia grande, conocidas localmente como pipos. Estas legumbres se sirven en un guiso con chorizo y manitas de cerdo. Si eres goloso, prueba las yemas de Santa Teresa, un pastel hecho con harina, yema de huevo y azúcar.