Tu pareja acaba de proponerte una relación abierta para mantener relaciones sexuales con otras personas y de pronto tu vida da un giro de 360 grados. La mente no deja de bombardearte con cuestiones como «¿Ya no le intereso?, ¿Ha conocido a alguien?, ¿No le satisface nuestra vida sexual?».  El paso de una relación tradicional y monógama a una relación abierta no es fácil. Y antes de que odies a muerte al amor de tu vida, te ayudamos a hacer frente a esta propuesta y te guiamos en el proceso de adaptación para que aprendas a gestionar todos los cambios emocionales, mentales y sexuales que vengan.

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No caigas en el drama de inmediato. Valora que tu pareja se haya acercado a ti, es una señal de gran confianza. Significa que te respeta y quiere invitarte a conocer su mundo interior, sus necesidades y cómo se siente. Que tu pareja te proponga una relación abierta es mucho mejor a que te engañe a escondidas, ¿no crees?

Cómo actuar si tu pareja te propone una relación abierta

Tu pareja quiere experimentar con otras personas y como no puedes retenerla u obligarla a que no lo haga, solo te queda afrontar la situación con madurez y escuchar sus deseos. Es posible que te proponga a ti hacer lo mismo, por eso queremos guiarte con algunos consejos para que no salga “el ogro” que, de vez en cuando, vive dentro de ti y enfrentes el cambio con sensatez.

Acércate al concepto “relación abierta”

Lo primero es conocer bien qué es una relación abierta. Lee e investiga sobre el tema y compara si coincide con las pretensiones de tu pareja. Una relación abierta es aquella es la que se estable un pacto de mutuo acuerdo para tener relaciones sexuales o sentimentales con otras personas sin que esto se considere una infidelidad. Está claro que si tú no estás de acuerdo, deberéis de evaluar el punto en el que se encuentra vuestra relación y tratar de encontrar una solución para que tanto tú como tu pareja os sintáis cómodos con la nueva situación.

Descubre las razones por las que tu pareja necesita una relación abierta

Si tu pareja te ha propuesto una relación abierta, es normal que pienses que el motivo es que es adicta al sexo, pero hay otros motivos que no deberías de pasar por alto:

  • El nivel de deseo sexual no es el mismo que el tuyo y necesita satisfacerse.
  • Quiere experimentar con alguien de otro género.
  • Desea cumplir alguna fantasía que no ha podido contigo.
  • Vuestra relación ha caído en una rutina sin freno.
  • Le atrae alguien físicamente, pero no quiere perderte.

¿Qué pasa si no quiero tener una relación abierta con mi pareja?

Aunque estéis casados, no tienes por qué aceptar una relación abierta si no quieres. No lo hagas por presión o para evitar perder a tu pareja. Tus deseos también cuentan y el respeto entre ambos es esencial. Si ya tienes el «No» comunícaselo a tu pareja con calma y honestidad. Cuanto más transparente seas, mejor entenderá tu postura. No le insultes, ni te culpes. Buscad una solución que no os cause dolor, consultad ayuda profesional. Si tras tu negativa, tu pareja decide poner fin a la relación, asume las consecuencias sin presiones. Es una manera de descubrir quiénes sois realmente y qué necesitáis.

Para que una relación abierta funcione hay que tener una relación sólida con buena comunicación, confianza y respeto. Si uno de los dos es celoso, no soportará este tipo de relación. Se debe estar preparado para separar el amor y el sexo y aprender a poner límites. La clave para que vuestra relación se mantenga a flote es hablar y expresar todo lo que sentís. Así que no tengas miedo si alguna vez te proponen abrir la relación, podrás con ello.