La Ruta del Agua de Berganzo, ubicada en las tierras alavesas, es un tesoro natural que te invita a explorar y conectar con la belleza de Euskadi. Esta ruta se encuentra en una zona fronteriza entre Castilla y León, La Rioja y Álava y ofrece en todo su recorrido una experiencia única para los apasionados del senderismo y la aventura.
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Lo mejor de todo: la Ruta del Agua es apta para toda la familia y se puede completar en unas tres horas.
Te llevamos de la mano a través de esta maravillosa ruta circular, donde el protagonista indiscutible será el río Inglares durante diez kilómetros.
Acceso fácil a la magia de la Ruta del Agua
Antes de iniciar tu aventura por la Ruta del Agua de Berganzo, ten en cuenta que, debido a su comprensible popularidad, no se permite estacionar libremente en esta localidad, ni tampoco realizar la ruta sin reserva previa. Dispones de un aparcamiento oficial al que podrás acceder a través de la aplicación móvil "Parking Verde". Te recomendamos reservar con antelación, ya que no hay cobertura móvil en la zona.
El aparcamiento se encuentra a menos de un kilómetro del pueblo de Berganzo, junto a la carretera A-3126. Si vienes desde Vitoria o Logroño, tardarás menos de una hora en llegar, mientras que desde Haro (La Rioja) o Miranda de Ebro (Burgos), estarás a solo 15 minutos de distancia.
Pero no importa de dónde vengas, la Ruta del Agua de Berganzo te recibe siempre con los brazos abiertos y mostrando todo su esplendor natural.
El encanto del pequeño y acogedor pueblo de Berganzo
Partiendo del aparcamiento oficial, adéntrate en un sendero bien señalizado que te llevará al corazón de Berganzo. A pesar de su modesto tamaño, este tranquilo pueblo conserva ejemplos de la arquitectura tradicional de la zona que son un deleite para la vista. A medida que te alejas de las últimas casas, te sumergirás en el sendero de gran recorrido GR-1, que recorre el impresionante valle del río Inglares.
El camino es amplio y está en excelente estado, permitiéndote disfrutar plenamente de la naturaleza en todo su esplendor. Justo en ese punto, encontrarás un desvío señalizado con marcas blancas y azules que marca el inicio de nuestra emocionante aventura: la Ruta del Agua de Berganzo.
La magia del río Inglares
El río Inglares se desvelará ante tus ojos con su deslumbrante color azul turquesa, que se intensifica a cada paso. Déjate llevar por la belleza del entorno, maravíllate con cada curva del río, cada cascada que saluda con su relajante música y cada piscina natural que te invita a sumergirte en sus aguas cristalinas. La extensión de esta zona es mucho mayor de lo que podrías imaginar, y explorarla en su totalidad requiere tiempo y una buena dosis de curiosidad. Cada paso te dejará sin palabras.
Cascada de Inglares o Las Herrerías
Después de disfrutar al máximo de esta maravillosa zona de la Ruta del Agua, cruzarás la carretera A-3126 y continuarás tu camino por el sendero, que te llevará en pocos minutos a otro punto impresionante: la cascada del Inglares, también conocida como la cascada de las Herrerías. Aquí, el paisaje cambia y los tonos azules dan paso a una exuberante paleta de verdes, rodeada de un frondoso bosque que te envolverá con su frescura. Disfruta de increíbles vistas panorámicas del valle, del propio pueblo de Berganzo y del majestuoso Castillo de Lanos.
La Central Hidroeléctrica de Berganzo
De regreso hacia el pueblo, te sorprenderás con un sendero paralelo al canal de la Central Hidroeléctrica de Berganzo. Esta antigua central, que aún funciona con orgullo, es uno de los vestigios industriales más antiguos de la zona.
Finalmente, descenderás hasta el nivel del pueblo de Berganzo y te despedirás de esta ruta del agua llena de magia. Solo te quedará seguir el mismo camino de regreso hacia el aparcamiento, con una sonrisa de satisfacción. ¡Vaya aventura acuática que nos hemos marcado!