La Garrotxa, una región encantadora situada en la provincia de Girona, es conocida por sus paisajes exuberantes y su rica historia. Entre sus maravillas naturales, se encuentra un lugar único y lleno de misterio: la Mina dels Bandolers. Para adentrarse en esta aventura, la ruta empieza pasando por la casa del Molino Viejo de Hostalets d'en Bas, un punto de partida encantador que invita a descubrir los secretos que acechan más adelante. También puedes empezar tu aventura desde una pequeña zona de aparcamiento situada en la entrada del camino. Aunque puedes llegar en coche, recuerda que es una vía restringida solo por los vecinos, así que tendrás que dejar el vehículo en este pequeño espacio, con capacidad para unos 5 coches. El aparcamiento se encuentra justo después de la Ermita de Sant Simplici.
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Después de pasar una masía a unos 5 minutos del aparcamiento y de cruzar el sendero, gira hacia la derecha, abandonando el Camino Real (que será tu retorno) y continúa por el margen del río. Encontrarás marcas verdes en los árboles que te orientarán. El camino sigue durando unos 10 minutos por el lado izquierdo del Torrent del Puig.
Continúa por el camino que serpentea ligeramente al lado del río hasta llegar a una pasarela que conduce al lado derecho de este. Después de 5 minutos, llegarás a la Fuente de las Fogosas, situada en el lado izquierdo. Esta fuente es a la penumbra, ofreciendo una vista espectacular del Torrent con la luz que se filtra entre los árboles. El agua es potable y accesible si el caudal es bajo.
Sigue por el lado derecho del río hasta llegar a una pequeña poza con una gran piedra plana. El camino se sube hacia la izquierda, así que tendrás que atravesar el río de nuevo. El terreno se vuelve más difícil, especialmente si ha llovido. Al cabo de 15 minutos, llegarás al Pozo Negro, con una cascada impresionante y una pared cóncava característica.
Continúa hasta el Pozo de la Olla, donde el camino se complica con dos cuerdas para facilitar la subida. A pesar de todo, es una parada obligada, probablemente por un baño. Una vez superado este tramo, hace falta atravesar el río y continuar hasta llegar a un mirador excepcional de la Vall d'en Bas, ideal para un desayuno o comida.
Después de volver al bosque, llegarás al Salt de l'Hostalot, un salto de agua espectacular sin pozo. Atraviesa el río de nuevo y continúa hasta llegar a la Font de les Marrades, donde podrás volver a coger el Camino Real al principio de la ruta. En este punto sale un pequeño sendero que nos llevará hasta la Mina de los Bandolers, un pasaje de más de 51 metros de largo. Es una formación de grietas a las montañas catalanas, conocida por los excursionistas y rodeada de leyendas. A pesar de no ser muy mencionada en la literatura espeleológica, es visitada por turistas y aficionados a la naturaleza. Tiene 51 metros de largo y 4 metros de desnivel máximo, con una segunda grieta paralela de 10 metros.
Mapa de la ruta de la Mina de los Bandoleros
Como siempre, aquí tienes el mapa de la ruta para que lo puedas seguir para no perderte por la montaña.